El embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan, mantuvo esta semana su primera reunión de trabajo con la nueva Coordinadora de Asuntos Humanitarios y Construcción de la ONU para la Franja de Gaza, Sigrid Kaag.
Erdan criticó duramente la conducta de las agencias de la ONU en Gaza y sus frecuentes declaraciones públicas específicamente contra Israel, mientras que Las FDI permiten la entrega de abundante ayuda humanitaria en Gaza y es Hamás quien impide su traslado a la población gazatí.
Subrayó a Kaag que, desde que asumió su cargo hace unos tres años, ha advertido en repetidas ocasiones sobre el uso que Hamás hace de las instalaciones de la ONU en Gaza, y no se ha hecho nada al respecto.
El embajador Erdan criticó la indiferencia de la ONU ante la excavación de los túneles de Hamás justo delante de las agencias de la ONU en Gaza, encabezadas por UNRWA, así como el uso de sus instalaciones para almacenar armas y el empleo de profesores que también son operativos de la organización terrorista.
Erdan dejó claro que Israel ayudará a la nueva coordinadora en su función y que recibirá toda la asistencia necesaria, pero que espera que actúe con imparcialidad y refleje la situación real sobre el terreno, a diferencia de lo que ha venido ocurriendo hasta ahora con los funcionarios de la ONU que operan en Gaza.
“El mundo debe conocer la verdad sobre los crímenes cometidos por Hamás y no aceptaremos seguir en una situación en la que los funcionarios de la ONU operan en la Franja de Gaza y presentan al mundo una imagen falsa de la situación, al tiempo que piden un alto el fuego que dejará a los asesinos de Hamás en el poder en Gaza e ignoran la difícil y peligrosa realidad que seguirá existiendo en la Franja de Gaza si, de hecho, hay un alto el fuego”, afirmó.
Kaag está casada y tiene cuatro hijos. Su marido, Anis al-Qaq, es dentista y un árabe palestino que fue viceministro de Yaser Arafat en la década de 1990 y representante de la Autoridad Palestina en Suiza.