NACIONES UNIDAS – La embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, Nikki Haley, advirtió el lunes que si el Consejo de Seguridad de la ONU no actúa sobre Siria, Washington “sigue dispuesto a actuar si es necesario”, tal como lo hizo el año pasado cuando bombardeó una base aérea del gobierno sirio en represalia por un ataque mortal de armas químicas.
“No es el camino que preferimos, pero es un camino que hemos demostrado que tomaremos y estamos dispuestos a tomar nuevamente”, dijo Haley al Consejo de Seguridad de 15 miembros. “Cuando la comunidad internacional fracasa constantemente en actuar, hay momentos en que los Estados se ven obligados a tomar sus propias medidas”.
La advertencia de Haley se produjo cuando Estados Unidos solicitó al Consejo de Seguridad que exigiera un cese al fuego inmediato de 30 días en Damasco y el este de Ghouta, donde las fuerzas del presidente sirio Bashar al-Assad, respaldadas por Rusia e Irán, dicen que atacan a “terroristas” grupos que están bombardeando la capital.

El Consejo de Seguridad exigió un cese del fuego de 30 días en toda Siria en una resolución adoptada por unanimidad el 24 de febrero. Rusia había dicho que el Consejo de Seguridad no podía imponer un alto al fuego sin un acuerdo entre las partes en conflicto.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, informó al consejo el lunes sobre la implementación de la resolución.
“No ha cesado la hostilidad”, dijo Guterres. “La violencia continúa en el este de Ghouta y más allá, incluso en Afrin, partes de Idlib y en Damasco y sus suburbios”.
“A pesar de algunas entregas de convoy limitadas, la provisión de ayuda humanitaria y servicios no ha sido segura, sin impedimentos o sostenida”, dijo Guterres. “No se han levantado asedios… Hasta donde sabemos, ninguna persona gravemente enferma o herida ha sido evacuada”.

Miles de familias duermen al aire libre en las calles de la ciudad más grande del enclave este de Ghouta, en manos de los rebeldes, donde ya no hay espacio en bodegas repletas para protegerse del bombardeo gubernamental, dijeron las autoridades locales.