El jefe de Hamás, Ismail Haniyeh, se acercó a varios líderes árabes y extranjeros para tratar de obstaculizar una resolución de la Asamblea General de la ONU redactada por Estados Unidos que, de ser aprobada, condenaría a Hamás por lanzar cohetes contra Israel y exigiría el fin de sus actividades violentas.
La Asamblea General de la ONU está programada para votar sobre el proyecto de resolución el jueves, según la misión de los Estados Unidos ante el organismo mundial.
«Haniyeh se contactó con varios líderes y ministros de asuntos exteriores en la región y más allá para abortar los esfuerzos estadounidenses para aprobar una resolución que condena a la resistencia palestina y a Hamás», dijo el grupo terrorista en un comunicado publicado en su sitio web el domingo.
Haniyeh llamó al secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit, al ministro de Relaciones Exteriores de Qatar Mohammed bin Abdulrahman al-Thani y a los funcionarios de los Servicios Generales de Inteligencia egipcios, según el comunicado.
También envió cartas al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, y a otros líderes regionales e internacionales, dijo Hamás.
En las cartas, Haniyeh defendió el «derecho» del pueblo palestino «a resistir la ocupación con todos los medios posibles, incluida la resistencia armada», según el comunicado.
Los esfuerzos estadounidenses para aprobar una resolución en la Asamblea General de la ONU que condena a Hamás se producen semanas después de un gran estallido en la violencia transfronteriza entre Israel y los grupos terroristas en la Franja de Gaza que vieron cientos de cohetes disparados contra Israel y ataques aéreos de represalia en la Franja.

El proyecto de resolución cuenta con el respaldo de la Unión Europea, según la Misión de los Estados Unidos ante la ONU.
Si los Estados miembros de la Unión Europea votaran a favor del proyecto de resolución, aumentarían dramáticamente sus posibilidades de ser adoptados. Sin embargo, no está claro si su respaldo garantizaría la mayoría simple necesaria entre los 193 Estados miembros de la ONU para su aprobación.
El proyecto de resolución “condena a Hamás por lanzar repetidamente cohetes contra Israel y por incitar a la violencia, poniendo en riesgo a los civiles” y exige que “Hamás y otros actores militantes, incluida la Jihad Islámica Palestina, cesen todas las acciones provocativas y las actividades violentas”.
Estados Unidos considera a Hamás y la Jihad Islámica como grupos terroristas.
El proyecto de resolución también insta a todas las partes a respetar plenamente el derecho internacional humanitario, «incluso en lo que respecta a la protección de la población civil».
En los últimos días, los funcionarios palestinos con sede en Ramallah se han manifestado en contra del proyecto de resolución patrocinado por Estados Unidos.
El sábado, el portavoz de Fatah, Osama Qawasma, dijo que su partido «rechaza totalmente» el proyecto de resolución y prometió que intentaría derrotarlo.
El mes pasado, Saeb Erekat, el secretario general del Comité Ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina, criticó el proyecto de resolución y lo calificó de «intento de poner los hechos en su cabeza».