La ex embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, condenó a Canadá por votar a favor de una resolución de la Asamblea General contra Israel, alegando que en sus acciones el gobierno hizo un “trato con el diablo”.
Haley hizo la proclamación en la Gala de UN Watch en la ciudad de Nueva York el jueves, agregando que Canadá está “cambiando su integridad por un puesto en el Consejo de Seguridad” al usar el voto para dañar al Estado de Israel, según Algemeiner.
“Hace dos semanas, Canadá sorprendió a los amigos de Israel al votar a favor de una resolución de Corea del Norte que cuestiona la legitimidad de Israel”, dijo Haley. “Esta es una resolución que los gobiernos canadienses han votado en contra durante años”.
Describió las reuniones mensuales del Consejo de Seguridad de la ONU como una “sesión mensual de golpizas a Israel” y explicó que el grupo consiste en una “cultura de matones” que no están a la altura de su carácter esperado.
“Si queremos hablar de seguridad en Oriente Medio, deberíamos hablar de Irán o Siria o Hezbolá o Hamás o ISIS o de la hambruna en Yemen”, explicó Haley. “Hay unos diez problemas importantes que enfrenta Oriente Medio, e Israel no tiene nada que ver con ninguno de ellos”.
Además de las resoluciones en contra de Israel, Haley señaló que en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU hay actualmente múltiples naciones, como China, Cuba, Egipto y Arabia Saudita, que actualmente tienen poder de voto y/o de cabildeo, y más que se unirán en enero.
“Muchos nos animaron a permanecer en el Consejo porque Estados Unidos, dijeron, proporcionó la última pizca de credibilidad que tenía el Consejo de Derechos Humanos”, concluyó Haley. “Y fue precisamente por eso que decidimos irnos. Estados Unidos no debe dar credibilidad a este pozo negro de hipocresía política y corrupción”.