Israel ha modificado significativamente la distribución de ayuda humanitaria destinada a la Franja de Gaza, reorientando el apoyo previamente canalizado a través del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en el Cercano Oriente (UNRWA). Ahora se prioriza el envío de asistencia a través de otras entidades.
Datos del Coordinador de Actividades Gubernamentales en los Territorios (COGAT) israelí revelan un cambio en la asignación de recursos: el 52% de los suministros alimentarios se dirige al Programa Mundial de Alimentos, un 34% continúa hacia la UNRWA, y el restante se distribuye entre diversas organizaciones de ayuda.
Una fuente de seguridad indicó que esta redistribución responde a una estrategia deliberada de Israel por minimizar el papel de la UNRWA en Gaza.
En una reciente cumbre titulada “La Cumbre Internacional para un Futuro más allá de la UNRWA”, celebrada cerca de la sede de la ONU en Ginebra, diversas figuras públicas y expertos consensuaron sobre la necesidad y viabilidad de encontrar alternativas a la UNRWA para contribuir a la paz sostenible en la región.
Zlatko Zigic, exfuncionario de la Organización Internacional para las Migraciones de la ONU, comparó la situación humanitaria de Gaza con otras crisis globales, argumentando que existen organizaciones capaces de asumir las responsabilidades de la UNRWA. Citó la eficacia de otras ocho entidades que asistieron a millones en Sudán en poco tiempo.
Por su parte, Shahar Ayalon, embajador de Israel ante las organizaciones de la ONU, criticó la inacción de la ONU ante las repetidas alertas de Israel sobre la conducta de la UNRWA y su supuesta vinculación con elementos terroristas. Ayalon recordó que, desde 2011, Israel ha reportado a empleados de la UNRWA presuntamente asociados con Hamás, sin que se hayan tomado medidas efectivas al respecto. Resaltó la incongruencia de mantener la colaboración con la UNRWA a la luz de estas acusaciones y su relación con eventos violentos como la masacre del 7 de octubre.