El ministro de Asuntos Exteriores, Israel Katz, acusó al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, de estar “hombro con hombro con los violadores y asesinos de Hamás” por no incluir al grupo terrorista en la lista negra. Esto fue mencionado en un informe publicado hoy que identifica a las organizaciones sospechosas por la ONU de cometer actos de violencia sexual durante la guerra.
Katz criticó a Guterres por “negarse a reconocer la responsabilidad de Hamás en los graves crímenes sexuales documentados en el informe Patten y por no declararlo una organización terrorista”.
“Estoy convencido de que si los crímenes del régimen nazi se discutieran durante su mandato, él también se negaría a condenarlos si sus intereses políticos lo exigieran”, declaró el ministro en un comunicado emitido por el Ministerio de Relaciones Exteriores. “Guterres ha convertido a la ONU en una institución extremadamente antisemita y antiisraelí, y su tiempo en el cargo será recordado como el más oscuro en la historia de la organización”.
El ministerio añadió que Guterres ignoró “la plétora de testimonios y pruebas que fueron recopilados y posteriormente incluidos en el informe de la representante especial del secretario general sobre la violencia sexual en conflictos, Pramila Patten”.
Patten, el enviado de las Naciones Unidas para los delitos sexuales durante la guerra, presentó el mes pasado un informe ante la ONU en el que indicaba que probablemente se produjeron violaciones y violaciones en grupo durante el ataque de Hamás contra el sur de Israel el 7 de octubre, y que las pruebas “claras y convincentes” demuestran que los rehenes fueron violados mientras estaban retenidos en Gaza, enfrentándose aún a tales abusos quienes actualmente están cautivos.
El Ministerio de Asuntos Exteriores informó que, aunque el informe de Patten “reconoció explícitamente la conexión entre el ataque de Hamás del 7 de octubre y los horribles actos de violencia sexual ejecutados de manera sistemática y deliberada”, el secretario general de la ONU no atribuyó la responsabilidad a la organización terrorista Hamás. Según el ministerio, este informe “constituye un testimonio miserable y trágico de lo inadecuado del funcionamiento de la ONU y de su líder desde el 7 de octubre, y alienta el terrorismo y la violencia”.
Pramila Patten, en su discurso de hoy ante el Consejo de Seguridad, reiteró sus conclusiones: “Después de los ataques del 7 de octubre por parte de Hamás y otros grupos armados, así como civiles armados, visité Israel por invitación del Gobierno. Mi equipo y yo confirmamos que hay motivos razonables para creer que se produjo violencia sexual relacionada con la guerra en al menos tres lugares, y que se ha cometido violencia sexual contra personas retenidas como rehenes y puede continuar ocurriendo”.