La Asamblea de la ONU votará el viernes por la noche la propuesta palestina de solicitar un dictamen jurídico a la Corte Internacional de Justicia de La Haya sobre el “significado legal de la actual ocupación israelí”.
Según la propuesta, la presencia israelí en Judea y Samaria y Jerusalén es ilegal y pide al tribunal que recomiende las medidas que la ONU y los países del mundo deben tomar contra Israel debido a esta presencia que, según la propuesta, constituye una “anexión” del territorio.
“Ningún organismo internacional puede decidir que el pueblo judío es “ocupante” en su propia patria. Cualquier decisión de un órgano judicial que reciba su mandato de la moralmente quebrada y politizada ONU es completamente ilegítima”, declaró el embajador de Israel ante las Naciones Unidas, Gilad Erdan.
“La despreciable decisión que se espera que se tome hoy es una vergüenza para la ONU y para cualquier país que la apoye. Los palestinos han rechazado todas las iniciativas de paz, incitan al asesinato todos los días y apoyan el terrorismo, y la ONU les ayuda a perjudicar a Israel. No participaremos en esta vergüenza y espectáculo de mentiras”.
Dado que el momento de la votación tenía lugar en Shabat, el embajador Erdan anunció que no intervendría en la reunión y que la Misión de Estados Unidos ante la ONU votaría en contra de la resolución propuesta en nombre del Estado de Israel.
“La decisión de celebrar una votación que trata de Israel en Shabat es otro ejemplo de la decadencia moral de la ONU, que impide que se escuche la posición de Israel en una votación cuyos resultados están predeterminados”, declaró.
Asamblea General de la ONU en septiembre de 202
Hace un año, en la Asamblea General de la ONU de septiembre de 2021, Mahmud Abbas anunció en su discurso que si Israel no se retiraba a las líneas del 67 en el plazo de un año, los palestinos recurrirían a La Haya. La votación del viernes es la materialización del ultimátum de Abbas.