BEIRUT, Líbano – La misión de Naciones Unidas en Líbano pidió el domingo a los militares del país que garanticen la seguridad de sus fuerzas de paz, alegando que el personal fue “amenazado” por hombres armados el día anterior.
La Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para el Líbano (FPNUL) lleva mucho tiempo desplegada en el sur del país -bastión del poderoso grupo terrorista chiíta Hezbolá- para mantener una barrera con Israel, ya que ambos países siguen técnicamente en guerra.
Una patrulla rutinaria de la FPNUL se enfrentó el sábado a “un grupo de hombres vestidos de civil” cerca del distrito árabe de al-Louaize, en el sur del Líbano, dijo el portavoz de la fuerza Andrea Tenenti en un comunicado.
Los hombres “amenazaron a los soldados e intentaron tomar sus armas”, dijo.
“Los ataques, las amenazas y los actos de intimidación contra el personal de mantenimiento de la paz de la FPNUL (…) son motivo de grave preocupación, y pedimos a las fuerzas armadas libanesas que garanticen la seguridad y la libertad de movimiento” de la fuerza de la ONU, dijo en un comunicado.
Las autoridades libanesas no han comentado el incidente del sábado.
La FPNUL se reforzó tras una devastadora guerra de un mes de duración en 2006 entre Israel y Hezbolá.
Hezbolá fue la única facción a la que se le permitió conservar las armas tras el final de la guerra civil libanesa de 1975 a 1990, y las tensiones entre sus partidarios y las fuerzas de paz de la ONU no son ni mucho menos raras, aunque suelen contenerse rápidamente.
La FPNUL está formada en gran parte por contingentes de países europeos y cuenta con unos 10.000 efectivos de mantenimiento de la paz en Líbano.