NACIONES UNIDAS – El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas condenó el viernes por unanimidad el asesinato de la periodista palestino-estadounidense de Al Jazeera, Shireen Abu Akleh, muerta en medio de enfrentamientos entre hombres armados palestinos y tropas israelíes mientras cubría una redada militar en Judea y Samaria, según informaron los diplomáticos.
La declaración -un raro caso de unidad del Consejo de Seguridad en un asunto relacionado con Israel- también pedía “una investigación inmediata, exhaustiva, transparente e imparcial sobre su asesinato”.
Según diplomáticos que hablaron bajo condición de anonimato, las negociaciones sobre el texto fueron especialmente arduas.
China presionó con éxito a Estados Unidos para que eliminara los párrafos en los que se denunciaban los abusos cometidos contra los medios de comunicación en todo el mundo, se defendía su libertad y se instaba a protegerlos mientras cubrían operaciones militares, según fuentes diplomáticas y diferentes versiones de la declaración obtenidas por la AFP durante las discusiones.
El texto final se limita a decir que “los periodistas deben ser protegidos como civiles” y no menciona la violencia durante el funeral de Abu Akleh el viernes.
Las imágenes de televisión mostraron a los portadores del féretro luchando para evitar que el ataúd de Abu Akleh cayera al suelo, mientras los policías israelíes cargaban contra ellos, arrebatando las banderas palestinas a los dolientes. La policía ha dicho que el féretro fue tomado por una turba, en contra de los deseos de la familia, frente al Hospital San José de Jerusalén, lo que provocó la intervención de los policías.
Abu Akleh partió el miércoles por la mañana hacia Jenín para cubrir los enfrentamientos entre las tropas israelíes y los palestinos armados. Recibió un disparo en la cabeza mientras llevaba un chaleco de prensa, y las autoridades israelíes y palestinas ofrecieron diferentes versiones sobre quién la mató.
Presuntos testigos y funcionarios palestinos dijeron que los soldados israelíes mataron a Abu Akleh. Los funcionarios israelíes dijeron en un primer momento que era probable que hombres armados palestinos le hubieran disparado por error, pero más tarde dijeron que los disparos errantes de francotiradores israelíes también podrían haber causado su muerte.
Israel insiste en que no puede determinar quién le disparó sin examinar la bala extraída de su cuello, informó el viernes el Canal 12, y añadió que Israel ha pedido ayuda a Estados Unidos para persuadir a la Autoridad Palestina de que coopere.
El sábado, la Autoridad Palestina dijo que, aunque los organismos internacionales podían “participar” en la investigación, no se permitiría a Israel unirse a la investigación sobre la muerte de Abu Akleh.