La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) ha expresado su preocupación tras un ataque mortal de Israel contra trabajadores humanitarios en Gaza.
Según el portavoz Jeremy Laurence, “atacar a personas u objetos involucrados en la asistencia humanitaria puede constituir un crimen de guerra”. Enfatizó la necesidad de acabar con la impunidad, haciendo eco de declaraciones previas de la Alta Comisionada.
Este lunes, un ataque aéreo israelí impactó un convoy de World Central Kitchen, resultando en la muerte de siete de sus trabajadores.
Este grupo estaba en la tarea de distribuir 100 toneladas de alimentos. Laurence resaltó las “terribles condiciones” bajo las cuales los humanitarios operan en Gaza, recordando que el derecho internacional obliga a proteger a estos trabajadores.
La muerte del personal de World Central Kitchen y la subsiguiente suspensión de ayuda por parte de ONG elevan el riesgo de más decesos por hambruna y enfermedades, alertó Laurence.
Esto subraya la crítica situación en la Franja de Gaza y el imperativo de respetar y proteger a quienes brindan asistencia vital.