La Asamblea general de las Naciones Unidas decidirá el jueves sobre un proyecto de resolución que demanda un cese inmediato, incondicional y permanente de las hostilidades en la guerra de Gaza. Esto ocurre una semana después de que Estados Unidos bloqueó una iniciativa similar en el Consejo de Seguridad.
Diplomáticos anticipan que el texto obtendrá un respaldo mayoritario entre los 193 miembros de la Asamblea, a pesar de los esfuerzos de Israel por disuadir a los países. Israel calificó la votación como una “farsa contraproducente y políticamente motivada” y presionó para que las naciones no participen Demandas anteriores del organismo para detener la guerra entre Israel y los terroristas de Hamás no han sido acatadas. A diferencia del Consejo de Seguridad, ningún país tiene poder de veto en la Asamblea.
La votación precede a una conferencia de la ONU programada para la próxima semana, enfocada en reactivar el impulso hacia una solución de dos Estados entre Israel y Palestina. Estados Unidos ha exhortado a las naciones a no asistir. En una nota obtenida por Reuters, Washington advirtió que los países que adopten posturas antiisraelíes tras la conferencia podrían enfrentar “consecuencias diplomáticas”.
La semana pasada, Estados Unidos vetó un proyecto en el Consejo de Seguridad que también exigía un “alto el fuego inmediato, incondicional y permanente” y un acceso irrestricto a la ayuda humanitaria en Gaza. Argumentó que dicha medida debilitaría las negociaciones lideradas por Washington para lograr un cese de hostilidades.
Los 14 miembros restantes del Consejo apoyaron el texto, mientras Gaza enfrenta una crisis humanitaria que afecta a sus más de 2 millones de habitantes. La ONU ha alertado sobre una posible hambruna, aunque evaluaciones previas han resultado exageradas debido a datos imprecisos.
Tras un bloqueo de dos meses y medio para presionar a Hamás por la liberación de rehenes y su renuncia al poder, Israel permitió el ingreso de ayuda básica el último mes. La Fundación Humanitaria de Gaza, apoyada por Estados Unidos e Israel, comenzó a distribuir asistencia desde tres puntos distintos.
El proyecto que la Asamblea votará incluye la liberación de los rehenes retenidos por Hamás, el retorno de terroristas palestinos presos detenidos por Israel y la retirada total de las fuerzas israelíes de Gaza. También solicita un acceso sin restricciones a la ayuda humanitaria y “condena enérgicamente el uso de la inanición de civiles como método de guerra, la denegación ilegal del acceso humanitario y la privación de objetos esenciales para la supervivencia”.
El embajador de Israel ante la ONU, Danny Danon, calificó estas acusaciones como “falsas y difamatorias” en una carta enviada el martes a los Estados miembros, según Reuters. Describió el proyecto como un “texto inmensamente defectuoso” que socava las negociaciones para liberar rehenes y no condena a Hamás.
En octubre de 2023, tras el ataque de Hamás que desató la guerra, la Asamblea aprobó una tregua humanitaria con 120 votos. En diciembre de ese año, 153 países apoyaron un alto el fuego inmediato. Un año después, con 158 votos, el organismo reiteró la exigencia de un cese permanente e incondicional.
Israel inició su ofensiva en Gaza tras el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, que dejó 1.200 muertos y 251 rehenes. Actualmente, 53 rehenes permanecen en poder de grupos terroristas, incluidos 33 cuerpos confirmados y 20 personas posiblemente vivas, según las Fuerzas de Defensa de Israel. Dos casos generan especial preocupación.
El Ministerio de Salud de Hamás reporta más de 55.000 muertos o presuntos muertos en los combates, aunque estas cifras no distinguen entre civiles y combatientes y no han sido verificadas. Israel afirma haber eliminado a 20.000 combatientes en Gaza hasta enero y a 1.600 terroristas en su territorio durante el ataque inicial.
Israel asegura que busca reducir las bajas civiles y acusa a Hamás de usar a la población como escudo humano, operando desde áreas residenciales, hospitales, escuelas y mezquitas. Las bajas israelíes en la ofensiva terrestre y en operaciones fronterizas suman 429.