Siete hombres fueron detenidos el viernes en una operación policial, sospechosos de participar en carreras ilegales de camellos en una zona de tiro de las Fuerzas de Defensa de Israel en el desierto del Néguev, según un comunicado de la policía.
En el comunicado también se indica que durante la operación se inspeccionaron 117 camellos en aldeas beduinas. La policía confiscó ocho de ellos bajo sospecha de que sus propietarios los utilizaban ilegalmente.
Los beduinos detenidos son sospechosos de organizar ilegalmente juegos de azar y violar las leyes de protección de los animales.
Además, la policía confiscó dos tractores y puso 14 multas de tráfico a los conductores que participaron en la carrera.
Además, la policía destruyó tres invernaderos que contenían 940 plantones de cannabis descubiertos durante las detenciones.
La protesta por la carrera de camellos estalló inicialmente el miércoles, cuando aparecieron imágenes de la carrera que se celebraba cerca de la base de Tze’elim de las FDI.
En la carrera participaron decenas de camellos, camiones y vehículos todoterreno que cruzaban a gran velocidad la zona de tiro de la base, y muchos de los participantes disparaban armas automáticas al aire.
Los residentes del sur de Israel se quejan de que la carrera es otro ejemplo de la anarquía en la región del Néguev.
La anarquía omnipresente es un problema de larga data en el Néguev, donde la presencia policial es limitada y a veces ineficaz. Los residentes judíos del Néguev se han enfrentado especialmente a los beduinos locales.