Un joven de 27 años murió el domingo por la mañana tras ser atacado a tiros mientras se dirigía a su trabajo en Yafa an-Naseriyye, al norte del país, cerca de Nazaret.
Paramédicos del servicio Magen David Adom encontraron a la víctima, identificada como Nour al-Din Abdelqader, con heridas graves y sin signos vitales. Pese a los intentos de asistencia, confirmaron su Muerte en el lugar.
Las autoridades han iniciado una investigación sobre el crimen. Desde comienzos de 2025, se han registrado 54 asesinatos en la comunidad árabe en circunstancias violentas, según datos de la organización Abraham Initiatives, que monitorea la violencia en la región.
En los últimos años, los homicidios en esta comunidad han aumentado drásticamente, con más de 200 víctimas anuales en 2023 y 2024. Líderes comunitarios acusan a las fuerzas de seguridad de negligencia, señalando que la mayoría de los casos quedan sin resolver. Un informe de Abraham Initiatives indicó que en 2024 las autoridades esclarecieron menos del 15 % de los asesinatos en la comunidad árabe.
El incremento de homicidios ha coincidido con la gestión del exministro de Seguridad Nacional Itamar Ben Gvir, quien asumió en 2023 y dejó el cargo este año tras el alto el fuego y el acuerdo de rehenes en Gaza. Su decisión de desechar un plan de combate contra el crimen organizado, elaborado en coordinación con líderes árabes, ha sido señalada como un factor clave en la escalada de violencia.
En enero, el gobierno de Benjamin Netanyahu designó temporalmente al ministro de Turismo, Haim Katz, en la cartera de Seguridad Nacional tras la salida de Ben Gvir y su partido Otzma Yehudit del gabinete.
Durante 2024, Abraham Initiatives contabilizó 230 homicidios en la comunidad árabe, mientras que en 2023 registró 244, más del doble en comparación con el año anterior. La policía confirmó que en 2023 la tasa de homicidios en la comunidad árabe se duplicó, aunque aún no ha publicado los datos oficiales de 2024.