Tras un ataque a tiros a las afueras de la Ciudad Vieja de Jerusalén que dejó siete heridos, dos de ellos graves, la policía informó el domingo por la mañana de la detención de un terrorista.
La policía afirmó en un comunicado que el sospechoso se entregó junto con la pistola que se habría utilizado en el crimen tras una persecución de varias horas.
En el comunicado no se menciona dónde se entregó el sospechoso. El sospechoso habría huido al barrio de Silwan, en las afueras de la Ciudad Vieja, donde las fuerzas de seguridad habían estado realizando registros.
El sospechoso, originario del Este de Jerusalén, tiene 28 años, según las noticias del Canal 12. Según la cadena, llegó a una comisaría de Jerusalén en taxi y se entregó.
El primer ministro, Yair Lapid, prometió que la persecución continuaría hasta la detención del autor, poco antes del anuncio de la policía.
El primer ministro emitió un comunicado en el que advertía: “Que todos los que nos desean el mal sepan que pagarán un precio por cualquier daño a las personas”.
Entre las víctimas del incidente se encuentra una mujer embarazada de 35 años que recibió un disparo mientras estaba en un automóvil vecino, según los medios de comunicación hebreos. Los médicos calificaron sus daños en el abdomen como “complicados” y afirmaron que corría peligro de perder la vida. Según el Hospital Shaare Zedek, tuvo un parto de urgencia, y el bebé se encontraba en estado grave pero estable.
Cuatro miembros de una familia jasídica de Satmar que llegaron de Estados Unidos de vacaciones el miércoles se encuentran supuestamente entre los heridos. Cuando les dispararon cerca de la Tumba del Rey David, los padres, el hijo y la hija estaban esperando un taxi en una parada de autobús. La madre fue descrita como en buen estado, pero el padre fue declarado en estado grave, drogado y con un respirador.
Cuatro miembros de una familia jasídica de Satmar que llegaron de Estados Unidos de vacaciones el miércoles se encuentran supuestamente entre los heridos. Cuando fueron tiroteados cerca de la Tumba del Rey David, los padres, el hijo y la hija estaban esperando un taxi en una parada de autobús. La madre fue descrita como en buen estado, pero el padre fue declarado en estado grave, drogado y con un respirador.
Según los informes, el presunto agresor esperó a que llegara el autobús para abrir fuego mientras los pasajeros subían y correr a pie hacia Silwan.
Inmediatamente después del incidente, Hamás, la organización terrorista palestina que controla la Franja de Gaza, lo calificó de “heroico” y de “respuesta lógica a los crímenes diarios de la ocupación contra nuestro pueblo, nuestro país y los principales lugares musulmanes y cristianos”.
El incidente tuvo lugar una semana después de tres días de duros combates entre Israel y la Yihad Islámica Palestina (PIJ), una organización terrorista apoyada por Irán que tiene su sede en Gaza y que se considera más radical que Hamás. Mientras las Fuerzas de Defensa de Israel realizaban ataques aéreos contra objetivos de la Yihad Islámica Palestina en la Franja, se dispararon más de 1.000 cohetes contra ciudades israelíes.
Desde marzo han muerto 19 personas en atentados, la mayoría de ellas ciudadanos israelíes dentro de Israel y llevados a cabo principalmente por palestinos.