Un grupo de familiares de los rehenes retenidos en Gaza imploró al primer ministro Benjamin Netanyahu que cualquier pacto para finalizar la guerra contemple la liberación de todos los cautivos. La urgencia de sus demandas refleja la angustia que enfrentan ante la incertidumbre sobre el destino de sus seres queridos.
En Gaza permanecen 58 rehenes, y las autoridades israelíes estiman que aproximadamente un tercio de ellos aún está con vida. Esta cifra agrava la desesperación de las familias, que buscan respuestas concretas sobre el futuro de los cautivos.
Ayelet Samerano, madre de Jonathan Samerano, cuyo cuerpo se encuentra en Gaza, participó en una reunión con Netanyahu el jueves. Expresó su dolor tras conocer que la propuesta actual solo incluye la liberación de 10 rehenes y algunos cuerpos. “Esto representa otra selección cruel. Todas las familias estamos paralizadas, preguntándonos si será nuestro hijo el elegido o no. ¿Qué ocurrirá con los que queden atrás?”, afirmó.
La Casa Blanca anunció el jueves que Israel aceptó una iniciativa estadounidense para un cese temporal de hostilidades con Hamás. Sin embargo, la respuesta de Hamás ha sido menos receptiva, lo que complica las negociaciones.
Samerano, con firmeza, instó a Netanyahu a actuar con determinación. “Si Hamás exige garantías, ofrézcanlas. Aseguremos que, tras el regreso de los últimos rehenes a Israel, la guerra cesará. Netanyahu, debes decir que sí. Nuestros países lo piden, las familias lo exigimos. Queremos que el mundo se detenga y nos devuelvan a los rehenes”, declaró.