Los trabajos de construcción comenzaron el martes para mejorar una sección de la barrera de seguridad de Judea y Samaria, meses después de una serie de mortíferos ataques terroristas cometidos por palestinos que entraron ilegalmente en Israel, dijeron funcionarios de defensa.
El Ministerio de Defensa dijo que el muro de hormigón de 9 metros de altura sustituye a un tramo de 45 kilómetros de valla desde una zona del norte de Judea y Samaria hasta la región israelí de Bat Hefer. Este es uno de los primeros tramos de la barrera que se construyó, hace unos 20 años.
En abril se destinaron 300 millones de NIS (unos 93 millones de dólares) a este plan.
Por otra parte, en abril se iniciaron las obras de reparación de agujeros en decenas de kilómetros de la valla, tras una serie de mortíferos atentados terroristas en Israel. En varios de los ataques, los terroristas del norte de Judea y Samaria entraron en Israel a través de grandes agujeros en la barrera.
El 7 de abril, un terrorista palestino -que entró en Israel a través de un hueco en la barrera- mató a tiros a tres personas en Tel Aviv. Una semana antes, un palestino que también cruzó la barrera ilegalmente -con un vehículo- disparó y mató a cinco personas en Bnei Brak. Y el 5 de mayo, en Elad, dos palestinos que entraron ilegalmente en Israel mataron a tres personas en un ataque con hacha.
«Continuamos nuestros esfuerzos defensivos en el norte, reforzando la barrera de seguridad de Judea y Samaria y proporcionando soluciones para el frente interno israelí», dijo el ministro de Defensa, Benny Gantz, en un comunicado publicado por su oficina el miércoles.
«Estos esfuerzos constituyen una parte integral de nuestra actividad operativa. Junto con esto, seguiremos operando contra todas las amenazas que enfrentamos para mantener la seguridad de los civiles de Israel», agregó.
En los últimos años, miles de palestinos entraban cada día en Israel a través de los huecos de la valla para trabajar.
Pero en los últimos meses, las FDI han enviado miles de tropas a la zona de separación -una franja de terreno de Judea y Samaria en el lado israelí de la barrera- para impedir que los palestinos crucen a Israel.
La barrera de seguridad de Judea y Samaria fue propuesta por primera vez en la década de 1990 por el entonces primer ministro Isaac Rabin. Pero el proyecto nunca se materializó debido a la oposición interna.
Solo durante la Segunda Intifada, cuando Israel luchó contra las oleadas de atentados suicidas y otros ataques terroristas procedentes de Judea y Samaria, se reactivó la idea y se puso en marcha.
Muchos atribuyen a la barrera el mérito de haber contribuido a poner fin a ese levantamiento, que duró de 2000 a 2005, aunque de su recorrido previsto de 708 kilómetros (440 millas), solo se ha completado el 62 %.
La barrera de seguridad no ha estado exenta de polémica, ya que la valla ha provocado manifestaciones locales y condenas internacionales por su trazado, que se adentra en Judea y Samaria a través de campos palestinos incautados y a veces separa a los agricultores de sus tierras.
Alrededor del 85 % de la barrera discurre dentro de Judea y Samaria, mientras que el 15 % restante discurre a lo largo de la Línea Verde -la línea de alto el fuego anterior a 1967- y dentro del territorio israelí. En total, se calcula que la barrera ha costado al país unos 9.000 millones de NIS (2.800 millones de dólares), según el Centro de Investigación e Información de la Knesset.
En la mayor parte de su recorrido, la barrera consiste en una valla de malla metálica equipada con cámaras de vigilancia y otros sensores, protegida por alambre de espino y una zona de exclusión de 60 metros de ancho. En las zonas más urbanas -incluidos los alrededores de Jerusalén y Belén- la barrera no es una valla, sino un muro de hormigón de entre ocho y nueve metros de altura.