Bajo un cielo nublado y con temperaturas frías, ciudadanos israelíes se congregaron el jueves para acompañar el recorrido de un convoy que trasladaba los cuerpos de cuatro rehenes asesinados: Shiri Bibas, sus hijos Ariel y Kfir, y Oded Lifshitz. Los terroristas los habían secuestrado con vida el 7 de octubre de 2023.
Hamás entregó los ataúdes a la Cruz Roja en Jan Yunis durante una ceremonia cargada de propaganda. Posteriormente, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) recibieron los cuerpos en Gaza y los trasladaron a territorio israelí.
Tras una breve ceremonia militar, el convoy cruzó la frontera con los ataúdes envueltos en banderas israelíes, transportados en ambulancias de las FDI hasta el instituto forense Abu Kabir, en las cercanías de Tel Aviv, para su identificación.
A lo largo del recorrido, soldados y policías presentaron sus respetos con banderas e inclinaciones de cabeza. En Kibbutz Re’im, una de las comunidades más golpeadas por los ataques de Hamás, decenas de personas se apostaron en los márgenes de la carretera para presenciar el paso del convoy.
Bajo la lluvia, ciudadanos con paraguas y banderas amarillas expresaron su solidaridad con los rehenes. Algunos grupos guardaron silencio en señal de duelo, mientras otros entonaron el himno nacional, *Hatikva*. Muchas personas vistieron camisetas y cintas naranjas en honor a Shiri Bibas y sus hijos pelirrojos.
En Karmei Gat, ciudad donde residen temporalmente los habitantes de Kibbutz Nir Oz, cientos se reunieron con banderas israelíes para rendir homenaje a los rehenes asesinados.
Los cuatro secuestrados habían sido arrancados de sus hogares en Nir Oz el 7 de octubre, cuando Hamás perpetró una invasión y masacre que dejó 1.200 muertos y 251 personas secuestradas. Este ataque desató la actual guerra contra el grupo terrorista que gobierna Gaza.
En distintos puntos del país, ciudadanos se congregaron en puentes sobre la autopista para observar el paso del convoy. Frente al instituto forense Abu Kabir, más personas esperaban con banderas para despedir a los rehenes. En señal de luto, muchas banderas ondeaban a media asta.
Tel Aviv también fue escenario de homenajes. En la Plaza de los Rehenes, cubierta de banderas israelíes y cintas amarillas, la música melancólica llenó el ambiente. Globos amarillos y naranjas resaltaban en el cielo gris, simbolizando el cautiverio de los rehenes y el cabello rojizo de los niños Bibas.
“El sentimiento de culpa nos acompaña a todos, preguntándonos si pudimos haber hecho más para evitar esta tragedia”, expresó una mujer a la AFP.
El Foro de Rehenes y Familias Desaparecidas convocó a una ceremonia en Tel Aviv a las 19:00 horas para recordar a los cuatro asesinados. “Cargaremos con el dolor y la memoria, y exigiremos con firmeza la liberación de los rehenes restantes. Los vivos deben regresar para su rehabilitación, y los muertos, para recibir un entierro digno”, afirmaba el comunicado del foro.
Entre los oradores anunciados estaban Yael Adar, madre de Tamir Adar, quien murió combatiendo la invasión de Hamás en Nir Oz y cuyo cuerpo fue secuestrado, y el rabino Elchanan Danino, padre de Ori Danino, ejecutado en cautiverio tras ser secuestrado en la rave Nova.
Los cantantes israelíes Omer Adam e Ivri Lider, que habían programado conciertos para esa noche, cancelaron sus presentaciones y participaron en la ceremonia.
Con la recuperación de estos cuatro cuerpos, aún quedan 66 rehenes en Gaza, incluyendo al menos 35 que las FDI han confirmado como muertos. Se espera la liberación de seis rehenes vivos el sábado.