El invierno se ha despertado por fin y ha llegado a Israel, a pesar de las tormentas de nieve que han azotado el mundo durante semanas y especialmente en los últimos días.
Algunas personas experimentan dolor durante los meses más fríos porque su cuerpo puede sufrir alergia al frío, que puede causar algo más que dedos entumecidos.
La respuesta alérgica de la piel a la exposición al frío, también conocida como “urticaria por frío”, se produce tras la exposición al aire o al agua fríos. En determinadas circunstancias, los síntomas pueden aparecer incluso después de consumir bebidas o comidas frías.
¿Cuál es la causa?
Aunque en la mayoría de los casos se desconoce el origen de las alergias, en ocasiones pueden ser hereditarias, lo que sugiere una predisposición hereditaria. Algunas personas experimentan urticaria después de un acontecimiento que daña el sistema inmunitario, como una infección vírica o algunos tipos de cáncer.
La “prueba del cubito de hielo”, en la que se coloca un cubito sobre la piel del paciente durante unos minutos para determinar si se produce un bulto rojo e hinchado en la mano, es ideal para detectar las alergias al frío. Se diagnostica urticaria por frío si la región aplicada se enrojece e hincha.
Se desconoce el alcance total de esta incidencia. Su prevalencia en la población, según un estudio europeo, se sitúa en torno al 0,05%. Más que las crisis anafilácticas provocadas por la urticaria por frío, son mucho más frecuentes los síntomas alérgicos de erupción cutánea.
Síntomas
Una erupción roja en la piel que pica, una sensación de quemazón al calentarse la piel, dolores de cabeza, cansancio, ansiedad, molestias articulares, hinchazón, etc. son los síntomas más típicos de esta alergia.
En situaciones más graves puede derivar en anafilaxia. En este caso, las vías respiratorias se estrechan y la tensión arterial disminuye bruscamente, lo que dificulta enormemente la respiración.
El culpable habitual de una reacción tan dramática es la exposición de todo el cuerpo al frío. Además, puede haber problemas para respirar, mareos e hinchazón de lengua y garganta.
Tratamiento
Cuando el sistema inmunitario libera histaminas en respuesta a un resfriado, se desencadena una respuesta inflamatoria que puede provocar una reacción alérgica. Los antihistamínicos, los corticoides y, por supuesto, quedarse en casa, abrigarse bien y evitar los alimentos muy fríos son formas de tratamiento.