Las fuerzas israelíes demolieron la casa de un terrorista durante la noche en el norte de Judea y Samaria, y se enfrentaron a los alborotadores palestinos que se encontraban en el lugar, según informes del sábado por la mañana.
Las Fuerzas de Defensa de Israel habrían destruido la casa de Omar Ahmed Yassin Jaradat en la aldea de Silat al-Harithiya, según los medios de comunicación palestinos.
Según los informes, la casa de Jaradat fue destruida, pero la estructura externa del edificio quedó en pie.
La Media Luna Roja dijo que tres palestinos resultaron heridos durante los enfrentamientos con las fuerzas israelíes durante la demolición. No hubo más detalles sobre su estado.
Las Fuerzas de Defensa de Israel no han hecho ningún comentario oficial sobre la demolición o los enfrentamientos.
Jaradat está acusado de formar parte de una célula de la Jihad Islámica palestina que disparó y mató a Yehuda Dimentman cerca de Homesh en diciembre. Otros dos israelíes resultaron ligeramente heridos en el tiroteo.
La política de Israel es demoler las casas de los palestinos acusados de cometer atentados mortales.
En marzo, las fuerzas israelíes demolieron las casas de otros dos terroristas que participaron del atentado: Muhammad Youssef Jaradat y Ghaith Ahmed Yassin Jaradat, también de Silat al-Harithiya.
Las Fuerzas de Defensa de Israel dijeron que los militares arrasaron la casa del primero y destruyeron un piso de la vivienda en la que vivía el segundo.
Según el ejército, decenas de palestinos también se amotinaron durante las demoliciones de marzo y lanzaron piedras, bombas incendiarias y artefactos explosivos improvisados contra los soldados, que respondieron con medios de dispersión de disturbios y fuego real.
Las FDI demolieron la casa de un cuarto terrorista en febrero, durante la cual, según los palestinos, murió un adolescente en un tiroteo con las tropas israelíes.
Silat al-Harithiya se encuentra cerca de la ciudad de Jenín, una zona de la que proceden los terroristas de varios atentados recientes, incluido el asalto del jueves en Elad, en el que dos palestinos asesinaron a tres judíos.
Además de esos terrorristas mencionados, los autores de los recientes atentados mortales en Bnei Brak y Tel Aviv también procedían de Jenín y sus alrededores.
Numerosos sospechosos han sido acusados por el ataque a tiros de diciembre en el que murió Dimentman y otros dos resultaron ligeramente heridos.
Los tres fueron tiroteados cuando salían de una yeshiva en Homesh donde estudiaban. Homesh fue evacuado en 2005 tras la retirada de Israel de Gaza y de algunos poblados de Judea y Samaria.
Aunque la ley israelí prohíbe el reasentamiento en Homesh, el ejército ha tolerado la presencia de la yeshiva durante más de una década y media.
Desde el ataque, los residentes han intentado presionar al gobierno para que legalice la yeshiva.
El mes pasado, varios miles de israelíes marcharon hacia el poblado desmantelado de Homesh. Participaron varios políticos de la oposición, así como la ex jefa de la coalición, Idit Silman, a pesar de que la marcha suponía una violación de la ley militar, que prohíbe a los israelíes volver a los terrenos de los cuatro asentamientos que el gobierno desalojó en 2005.
La marcha provocó enfrentamientos entre las tropas israelíes y los palestinos que protestaban contra la concentración.