Ocho beduinos israelíes han sido detenidos por su presunta implicación en el robo de miles de cartuchos de una base militar del sur de Israel en octubre, según informaron el martes la agencia de seguridad Shin Bet y la policía.
Unas 30.000 balas -en su mayoría de 5,56 milímetros- fueron robadas de la base de Sde Teiman el 21 de octubre.
En un comunicado conjunto, el Shin Bet y la policía afirmaron que varios de los sospechosos -Harun al-Sana, Mamun al-Sana, Muhammad al-Sana y Hamed al-Sana- cortaron la valla de la base y robaron decenas de cajas de munición de un búnker de almacenamiento.
Otros dos sospechosos del mismo clan beduino de la aldea de Tarabin al-Sana -Abdul Karim al-Sana y Tarek al-Sana- fueron detenidos por vender la munición.
Y los dos últimos sospechosos, Osmat Abu Ghalioun y Odai Abu Sarikhan, residentes en Tel Sheva, fueron detenidos por la presunta compra de la munición robada.
Con las detenciones se recuperaron algunas de las balas, según informó la policía.
Se espera que la fiscalía presente en los próximos días cargos contra los ocho hombres. Se les acusa de varios delitos relacionados con las armas, además del delito de allanamiento de una base militar.
El primer ministro Yair Lapid saludó el martes la detención de los sospechosos durante una visita a la sede del Shin Bet.
Lapid señaló “que la captura de la brigada frustraría nuevos allanamientos de bases en el futuro y evitaría que el armamento de las FDI cayera en manos de organizaciones terroristas y criminales”, dijo su oficina en un comunicado.
Durante años, el ejército ha luchado contra los robos en sus bases, tanto por parte de soldados -que han robado de todo, desde balas y misiles hasta jeeps del ejército- como de bandas criminales.
Los responsables de seguridad temen que la munición robada pueda utilizarse en atentados terroristas. En marzo, se encontraron casi mil balas robadas de las FDI en manos de pistoleros inspirados por el Estado Islámico que mataron a dos agentes de la Policía de Fronteras en un atentado terrorista en Hadera.
En los últimos meses también se han incautado en los puestos de control miles de balas robadas del ejército a personas que se dirigían de Israel a Judea y Samaria.