Los adultos que beben entre 1,5 y 3,5 tazas de café sin endulzar o endulzado con azúcar tienen menos probabilidades de morir durante los siete años siguientes, según un nuevo estudio.
En efecto, los que beben esta cantidad media de tazas diarias de café edulcorado con azúcar tenían entre un 29% y un 31% menos de probabilidades de morir en el periodo de tiempo analizado, en contraste con los que no beben café en absoluto, según el estudio revisado por pares, que se publicó en Annals of Internal Medicine.
Por su parte, los participantes que bebían café sin endulzar en cualquier cantidad tenían entre un 16% y un 21% menos de probabilidades de morir en los siete años siguientes.
Sin embargo, los resultados del café endulzado con edulcorante artificial son menos claros.
Investigadores de la Universidad Médica del Sur de Guangzhou (China) descubrieron que, aunque estudios anteriores habían indicado una asociación entre el menor riesgo de muerte y el consumo de café, esos estudios observacionales no distinguían entre los distintos tipos o niveles de edulcorante.
Por ello, utilizaron los datos del Biobanco del Reino Unido para evaluar a más de 171.000 participantes de ese país, todos ellos sin enfermedades cardíacas ni cánceres conocidos. Con cuestionarios y preguntas sobre el comportamiento, pudieron acotar los resultados para descubrir que quienes toman café con azúcar o sin edulcorar tienen menos probabilidades de morir en los años siguientes.
Este no es el primer estudio que encuentra los beneficios de beber café; un estudio reciente realizado por investigadores de la Universidad Semmelweis de Budapest y la Universidad Queen Mary de Londres descubrió que beber tres tazas de café al día puede ayudar a vivir más tiempo.
Otro estudio de octubre de 2021, presentado en la reunión anual de la Sociedad Europea de Cardiología, concluyó que beber tres tazas de café al día puede proteger el corazón.
Otro estudio chino, por su parte, ha descubierto que quienes beben de dos a tres tazas de café, de tres a cinco tazas de té, o una combinación de cuatro a seis tazas de café y/o té al día, tienen el menor riesgo de accidente cerebrovascular y demencia.