El exjefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel, Gadi Eisenkot, declaró al Canal 12 que considera tener las capacidades necesarias para asumir el cargo de primer ministro. Afirmó que solo se postularía si estimara que su candidatura representa una decisión beneficiosa para el país. “Quiero ser primer ministro si sé que nos traerá la victoria”, afirmó durante la entrevista.
Eisenkot concedió esta declaración tras haber abandonado el partido Unidad Nacional y renunciado a su escaño en la Knéset. Indicó que la salida respondió a un cambio en la orientación del partido, que, según él, dejó de coincidir con sus creencias y su visión política. Rechazó que su decisión se debiera a la relación con Benny Gantz, líder del partido, y expresó que actuó en función de lo que consideró “correcto para el Estado de Israel”.
Al responder si planea competir por el cargo de primer ministro, Eisenkot reiteró que podría hacerlo solo si contribuye a aumentar las probabilidades de victoria del bloque opositor a Benjamin Netanyahu. “Puedo ser primer ministro”, aseguró. No ofreció un calendario ni un anuncio oficial de campaña, pero destacó que el tiempo definirá su decisión.
Respecto a las elecciones programadas para octubre de 2026, Eisenkot expresó que las considera “las más críticas y las más importantes desde la fundación del Estado”. Aunque no confirmó un camino político concreto, evalúa tres posibilidades: fundar un nuevo partido, integrarse al partido de Naftali Bennett o incorporarse a Yesh Atid, dirigido por Yair Lapid, con la opción de asumir el liderazgo de esa agrupación.
Consultado sobre estas alternativas, se limitó a señalar que analiza “muchas otras opciones”, sin precisar cuáles. También evitó definir su postura ideológica actual y no respondió si se identifica más con la línea política de Bennett o Lapid. Afirmó que busca “romper este discurso tóxico o izquierda”, sin proporcionar una posición más específica.
Al abordar la posibilidad de formar parte de un gobierno junto a Netanyahu, Eisenkot manifestó su rechazo. “Después del 7 de octubre, no me gustaría ver a Benjamin Netanyahu continuar ocupando puestos de liderazgo en el Estado de Israel”, declaró. Añadió que los hechos relacionados con el ataque de Hamás en 2023 “lo descalifican para los roles de liderazgo”. Según Eisenkot, la figura de Netanyahu quedará marcada por acciones tanto positivas como negativas.