Twitter no alojará los tuits del expresidente Donald Trump en su plataforma, según ha informado la compañía esta semana, lo que dificultará que los Archivos Nacionales (NARA) archiven las misivas que Trump envió cuando era comandante en jefe.
“Dado que suspendimos permanentemente a @realDonaldTrump, el contenido de la cuenta no aparecerá en Twitter como lo hacía antes o como lo hacen actualmente las cuentas de la administración archivadas, independientemente de cómo el NARA decida mostrar los datos que ha conservado”, dijo un portavoz de Twitter a los medios de comunicación en un comunicado.
“Las cuentas de administración que están archivadas en el servicio son cuentas que no infringían las normas de Twitter”.
El gigante tecnológico con sede en California no respondió a una solicitud de más información.
NARA dijo que los archivos “tienen la intención de proporcionar acceso público a todos los medios sociales capturados y conservados de los Registros Presidenciales, incluyendo cualquier Tweets bloqueados o eliminados que han sido transferidos a nosotros”.
“Twitter es el único responsable de la decisión de qué contenido está disponible en su plataforma. NARA trabaja estrechamente con Twitter y otras plataformas de medios sociales para mantener las cuentas sociales archivadas de cada administración presidencial, pero en última instancia los propietarios de las plataformas pueden negarse a albergar estas cuentas. NARA conserva copias independientes de los registros de las redes sociales en las plataformas y está trabajando para poner ese contenido a disposición del público”, dijo la agencia a The Epoch Times por correo electrónico.
Donald Trump no respondió a una solicitud de comentarios.
El contenido de las cuentas personales utilizadas por Trump y otras personas durante su administración se alojará en la Biblioteca Presidencial Donald J. Trump.
Varios sitios web privados tienen archivos de los antiguos tuits de Trump, pero NARA albergaría un registro oficial que podría ser utilizado por periodistas, organizaciones sin fines de lucro y otras organizaciones con confianza en la exactitud de las publicaciones.
Twitter suspendió permanentemente a Donald Trump el 8 de enero, acusándolo de incitar a la violencia a través de sus publicaciones.
Facebook también prohibió a Trump. Esa decisión está siendo revisada por el Consejo de Supervisión independiente de Facebook, que puede anular las acciones de la compañía.
Donald Trump ha criticado regularmente a las grandes tecnológicas por sus acciones contra él y otros conservadores y sus asesores dicen que está creando su propio sitio web de redes sociales que saldrá a finales de este año.
La plataforma “redefinirá completamente el juego” y atraerá a “decenas de millones” de usuarios, dijo el mes pasado el asesor Jason Miller. Un antiguo asesor, Corey Lewandowski, describió el sitio como “una herramienta de comunicación interactiva en la que el presidente va a poder publicar cosas que la gente podrá denunciar y comunicarse directamente con él.”
El empresario Mike Lindell, partidario de Donald Trump, también está trabajando en un competidor de la talla de Twitter y Facebook, aunque su puesta en marcha se ha retrasado varias veces.