Una corte de apelaciones alemana rechazó la queja de un hombre judío contra la decisión de un pueblo de permitir que una campana dedicada a Adolf Hitler continúe colgando en la torre de una iglesia.
El tribunal estatal de Koblenz confirmó el miércoles el rechazo de un tribunal inferior a la queja del pariente no identificado de los sobrevivientes del Holocausto, quien argumentó que la campana era una “burla y ridículo a las víctimas del terror de Hitler”.
El consejo de Herxheim am Berg votó el año pasado para preservar la campana, que lleva la inscripción “Todo para la Patria – Adolf Hitler” sobre una esvástica. También anunció planes para colocar una placa explicativa cerca con la esperanza de generar un diálogo sobre la violencia y la injusticia.
La corte de Koblenz encontró la respuesta apropiada, diciendo que la ciudad no estaba tratando de minimizar el Holocausto.
En 2017, Roland Becker, el alcalde de Herxheim am Berg, renunció tras la indignación por los comentarios que hizo sugiriendo que el período nazi no fue tan malo.
Tales campanas se extendieron durante la era nazi, pero la mayoría fueron removidas después de la guerra. No está claro por qué la campana de Herxheim permaneció en la iglesia protestante hasta hoy.