Durante la ceremonia anual “A cada persona hay un nombre” en la Knéset de Jerusalén, el presidente Isaac Herzog vinculó el Día de Conmemoración del Holocausto con los eventos del 7 de octubre.
“Este año, pedazo por pedazo, estábamos destrozados, y nuestros ojos vieron cosas que nunca pensamos que volveríamos a ver, como una nación libre en su propia tierra.
Las heridas del 7 de octubre siguen abiertas en nuestros corazones, lloramos y lloramos, y no podremos permanecer en silencio, mientras nuestros hermanos y hermanas sean rehenes en manos de los asesinos de Hamás”, expresó Herzog.
Además de recordar a sus propios familiares y a los de su esposa Michal Herzog, el presidente también conmemoró a varias víctimas del Holocausto relacionadas con los rehenes de Gaza, Matan Angrest y Alex Dancyg, un experto en el Holocausto.