El dictador sirio Bashar Assad dice que solo el ejército sirio puede proteger a los grupos en el norte de Siria.
En un discurso en la capital siria, Damasco, parece estar refiriéndose a grupos kurdos aliados de Estados Unidos, que temen un asalto turco una vez que las tropas estadounidenses se retiren del noreste de Siria.
Assad dice que las tropas extranjeras en Siria serán tratadas como fuerzas de ocupación.
No menciona específicamente el retiro planeado de 2,000 soldados estadounidenses del norte de Siria, pero dice que “nadie debería apostar por la protección de los estadounidenses”. Sugiere que el ejército sirio regresará al área después de la retirada de las tropas estadounidenses.
“Cada centímetro de Siria será liberado, y cualquier intruso es un enemigo”, dijo.
El máximo comandante de Estados Unidos que supervisa las fuerzas estadounidenses en Medio Oriente dijo el domingo pasado, que es probable que Estados Unidos esté a solo unas semanas de comenzar el retiro de las tropas terrestres de Siria.
A inicios de año, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, trató de poner fin a los temores de un abrupto retiro de Estados Unidos desde Siria, y dijo que la lucha contra el grupo del Estado Islámico no había terminado y que la retirada se haría de manera “prudente”.

“Nos iremos a un ritmo adecuado y al mismo tiempo continuaremos luchando contra ISIS y haciendo todo lo demás que sea prudente y necesario“, escribió Trump en Twitter.
El martes, la coalición liderada por Estados Unidos dice que golpeó una mezquita utilizada por el Estado Islámico como centro de comando y control en el este de Siria.
La coalición dijo que lanzó el ataque en apoyo de las Fuerzas Democráticas Sirias, lideradas por los kurdos, que luchan para expulsar a los extremistas de su último pequeño bastión cerca de la frontera con Irak.
Dijo que el ataque ocurrió el lunes cuando el Estado Islámico estaba usando la mezquita para dirigir ataques y emplear suicidas con coches bomba contra las SDF.

El comandante adjunto de la coalición, el mayor general Christopher Ghika, fue citado en el comunicado diciendo que “esta mezquita perdió su estatus de protección cuando el Estado Islámico eligió deliberadamente usarla como centro de comando y control”.
Los funcionarios israelíes expresaron su alarma de que una rápida retirada podría permitir a Irán expandir su influencia y presencia en Siria, sacudida por una guerra civil de años y la militancia del Estado Islámico. Según informes, Netanyahu le pidió a Trump que escalonara la retirada de Estados Unidos durante un largo período de tiempo, en lugar de llevar a cabo una retirada inmediata.
Actualmente, unas 2.000 fuerzas estadounidenses se encuentran en Siria, en medio de una compleja guerra civil. La mayoría de los soldados de los Estados Unidos están allí para entrenar a las fuerzas locales que luchan contra el Estado Islámico.