El grupo islamista palestino Hamás ha decidido restablecer los lazos con Siria, 10 años después de que sus dirigentes rechazaran a Damasco por su oposición a la represión del dictador Bashar al-Assad en una revuelta contra su gobierno, dijeron dos fuentes del grupo a Reuters.
Un funcionario que pidió no ser nombrado dijo que las dos partes han mantenido varias “reuniones de alto nivel para lograr ese objetivo”.
Un funcionario sirio no respondió de inmediato a una solicitud de Reuters para que hiciera comentarios.
Los líderes de Hamás han apoyado públicamente la revuelta destinada a derrocar el régimen dinástico de Assad y han abandonado su sede en Damasco. Eso enfureció a su aliado común, Irán.
Los lazos de Hamás con Irán se restablecieron más tarde y funcionarios de la facción islamista palestina elogiaron a la República Islámica por la ayuda prestada para construir su arsenal de cohetes de largo alcance en Gaza, que utilizaron en la lucha contra Israel.
La opción de que Hamás renueve sus relaciones con Siria ha desencadenado un feroz debate dentro de la organización. Algunos miembros de la organización están a favor de unirse al eje chiíta Irán-Siria-Hezbolá, pero otros dicen que un movimiento de este tipo obstaculizaría las relaciones de Hamás con Estados sunitas como Egipto y Arabia Saudita.
Parece que la facción pro chiíta está ganando, una posible respuesta a la presión de EE.UU. y al calentamiento de los lazos entre los países árabes e Israel.
Mahmod a-Zahar, un partidario del vínculo con Irán, declaró recientemente que Hamás debería optar por una presencia en Siria, señalando que el país había apoyado anteriormente al grupo terrorista y permitido sus actividades.
Otros que apoyan los vínculos con el eje chiíta dicen que tales relaciones diplomáticas sacarían a Hamás de la severa reclusión diplomática que está sufriendo.
Sin embargo, algunos de los que se oponen a la medida dijeron que Siria está devastada después de la prolongada guerra civil en el país y que no podrá ofrecer ninguna ayuda a Hamás.