Rusia no puede obligar a las fuerzas de Irán a abandonar Siria, dijo el lunes el embajador de Moscú en Israel, rechazando la demanda de larga data de Israel de que debería trabajar para garantizar su retirada total del país.
El embajador Anatoly Viktorov dijo que Moscú tampoco podría hacer nada para evitar los ataques militares israelíes contra las fuerzas de Irán en Siria, que junto con las milicias del grupo terrorista Hezbolá apoyadas por Rusia y Teherán apoyan al presidente Bashar Assad en la lucha contra los combatientes rebeldes.
Con Assad ahora en control casi total de las áreas del sudoeste que lindan con los Altos del Golán de Israel, Viktorov dijo al canal de televisión de Israel, Channel 10 en una entrevista que solo las tropas del ejército sirio deberían ser desplegadas allí.
La semana pasada, un funcionario israelí dijo que Rusia había ofrecido mantener a las fuerzas iraníes al menos a 100 km (60 millas) de la línea de alto el fuego de los Altos del Golán. La oferta surgió durante una reunión entre el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y el visitante ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, pero Israel la rechazó por insuficiente, dijo el funcionario.
Viktorov defendió la presencia de Irán en Siria.
“Están desempeñando un papel muy, muy importante en nuestro esfuerzo común y conjunto para eliminar a los terroristas en Siria. Es por eso que, durante este período de tiempo, vemos como no realista cualquier exigencia de expulsar a las tropas extranjeras de la totalidad de la República Árabe Siria”, dijo.
“Podemos hablar con nuestros socios de Irán de manera franca y abierta, tratando de persuadirlos de hacer o no hacer algo”, dijo. “Pero si preguntamos si Rusia puede expulsar a Irán”, respondió: “No podemos”.
Aunque formalmente neutral en la guerra civil de siete años de al lado, Israel ha llevado a cabo decenas de ataques aéreos contra emplazamientos o transferencias de armas por parte de las guerrillas iraníes a Hezbolá en Siria, aparentemente sin obstáculos por los sistemas de defensa rusos desplegados allí.
Una línea directa militar que Jerusalén y Rusia establecieron en 2015 también ha ayudado a los países a evitar el choque inadvertido sobre Siria.
Viktorov expresó su desaprobación de los ataques contra Siria, pero agregó: “No podemos dictarle a Israel cómo proceder… No le corresponde a Rusia darle libertad a Israel para hacer nada, ni prohibir que Israel haga algo”.