ANKARA — Según el ministro de Defensa, Yasar Guler, Turquía estima que los nuevos líderes en Siria, incluido el Ejército Nacional Sirio (SNA), respaldado por Ankara, lograrán desalojar a los combatientes kurdos YPG de las áreas que ocupan en el noreste del país.
El gobierno turco identifica al YPG sirio como un brazo del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), un grupo que lleva 40 años enfrentándose al Estado turco en una insurgencia. Este grupo es calificado de terrorista por Turquía, Estados Unidos y la Unión Europea.
Encabezando las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una coalición apoyada por Estados Unidos, las YPG mantienen el control sobre regiones del noreste sirio. Desde la caída de Bashar al-Assad hace dos semanas, Turquía y sus aliados sirios han combatido a las FDS y capturado la ciudad de Manbij.
Guler afirmó durante una visita a las tropas turcas en la frontera con Siria que confían en que el nuevo liderazgo, el SNA y el pueblo sirio en conjunto, liberarán todas las áreas bajo control de organizaciones terroristas.
“Eliminaremos todos los elementos terroristas más allá de nuestras fronteras con la misma determinación, tomando las medidas necesarias”, expresó Guler en un video publicado por su ministerio.
Ankara ha exigido que los combatientes kurdos sirios se desmovilicen y ha solicitado a Estados Unidos que deje de respaldarlos. Por su parte, el ejército estadounidense informó la semana pasada que tiene 2.000 soldados desplegados en Siria, el doble de lo que había reconocido previamente.