BERLÍN – Quince países europeos instaron el viernes a Israel a abandonar los planes recientemente aprobados para construir más de 4.000 viviendas en Judea y Samaria, advirtiendo que la construcción interfiere en el desarrollo de la paz entre israelíes y palestinos.
“Las nuevas viviendas constituirían un obstáculo adicional para la solución de los dos Estados”, dijeron los países en un comunicado emitido por sus ministerios de Asuntos Exteriores.
“Los asentamientos israelíes violan claramente el derecho internacional y se interponen en el camino de una paz justa, duradera y global entre israelíes y palestinos”, añadieron.
Los 15 países europeos que suscriben la declaración del viernes son Francia, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Polonia, Alemania, Grecia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Noruega, España y Suecia.
El organismo del Ministerio de Defensa que autoriza la construcción en Judea y Samaria dio luz verde el jueves a los planes para construir 4.427 nuevas viviendas en Judea y Samaria.
Los 25 planes de la lista fueron aprobados por el Alto Subcomité de Planificación de la Administración Civil. Más de la mitad de las viviendas recibieron la aprobación final para su construcción.
Los proyectos, tanto para los palestinos como para israelíes, se ubicarán en el Área C, donde Israel mantiene el control civil. Aproximadamente 330.000 palestinos y 450.000 israelíes viven en el 60 % de Judea y Samaria, que constituye la zona C, según cifras de la ONU y de las autoridades israelíes, respectivamente.
Además de aprobar miles de nuevas viviendas, los planes legalizaron retroactivamente los poblados de Mitzpeh Dani y Oz V’gaon. El primero es un barrio de Ma’aleh Michmash en el corazón de Judea y Samaria, mientras que el segundo es una reserva natural y un centro educativo que se construyó tras el secuestro y asesinato de los adolescentes israelíes Gil-ad Shaer, Eyal Yifrach y Naftali Fraenkel en el verano de 2014.
El jueves, el coordinador especial de la ONU para el proceso de paz en Oriente Medio condenó las aprobaciones israelíes.
“Condeno la decisión de hoy de las autoridades israelíes de avanzar en los planes de más de 4.000 viviendas en asentamientos en la Judea y Samaria ocupada. Esto incluye la aprobación retroactiva de dos puestos de avanzada ilegales y un parque”, dijo Tor Wennesland en un comunicado. “La continua expansión de los asentamientos afianza aún más la ocupación, invade la tierra y los recursos naturales palestinos y obstaculiza la libre circulación de la población palestina”.