Bee-io en Rehovot produce miel con fermentación microbiana, reduciendo el impacto ambiental y la presión sobre abejas. Busca expansión global para 2025.
Innovación israelí revoluciona la producción de miel
En Rehovot, Bee-io Honey Ltd., fundada en 2021, produce miel sin abejas mediante fermentación microbiana. Esta tecnología replica el proceso natural del estómago de las abejas, utilizando microorganismos en biorreactores para transformar néctar vegetal en miel. Ofir Dvash, director ejecutivo, explica: “Producimos proteínas que imitan las enzimas de las abejas, creando un producto idéntico a la miel natural”. La empresa, listada en la Bolsa de Tel Aviv bajo el símbolo BHNY, anunció que su producción industrial comenzó en marzo de 2022, con una capacidad de cientos de kilogramos semanales.
El método de Bee-io consume 70% menos energía que la apicultura tradicional y elimina riesgos como pesticidas, antibióticos y toxinas presentes en la miel convencional. La tecnología permite producir miel todo el año, independientemente de las estaciones o el clima, y utiliza néctar de plantas específicas para crear variedades únicas. En 2022, el primer ministro israelí y el alcalde de Nueva York, Eric Adams, probaron el producto, destacando su calidad y potencial. La empresa busca certificaciones para exportar a mercados como Estados Unidos y Europa en 2025.
La producción tradicional de miel enfrenta desafíos globales. La demanda, valorada en 9.08 mil millones de dólares en 2019, superó la oferta, con un crecimiento proyectado a 14.4 mil millones para 2025. Sin embargo, las poblaciones de abejas disminuyen debido a cambio climático, pesticidas y enfermedades, afectando la polinización y la biodiversidad. Bee-io aborda estos problemas al reducir la presión sobre las abejas, permitiéndoles enfocarse en su rol ecológico como polinizadoras.
La tecnología de Bee-io utiliza fermentación de precisión, un proceso que emplea microorganismos modificados para producir proteínas específicas. Estas proteínas, combinadas con néctar vegetal, generan miel con las mismas propiedades nutricionales, incluyendo vitaminas, antioxidantes y calcio, pero sin contaminantes. La empresa ha registrado seis patentes en Estados Unidos para proteger su tecnología, enfrentando competencia de startups como MeliBio, con sede en San Francisco.
Datos clave sobre la miel sin abejas de Bee-io

- Consumo energético: Reduce un 70% el uso de energía frente a la apicultura tradicional.
- Capacidad de producción: Cientos de kilogramos semanales desde marzo de 2022.
- Mercado global: Busca certificación para exportar a EE. UU. y Europa en 2025.
- Patentes: Seis solicitudes presentadas en EE. UU. para proteger la tecnología.
- Impacto ambiental: Elimina riesgos de pesticidas y toxinas, preservando abejas.
Tecnología sostenible para un mercado en crecimiento
El proceso de Bee-io comienza con la recolección de néctar vegetal, transformado mediante biosíntesis innovadora. Los microorganismos en biorreactores descomponen azúcares, replicando el proceso enzimático de las abejas. Efrat Dvash Riesenfeld, cofundadora y experta en genética molecular, lidera el desarrollo científico. La empresa asegura que su miel mantiene propiedades antibacterianas y antioxidantes, siendo segura incluso para bebés. Arik Kaufman, cofundador, aporta experiencia en startups de alimentos cultivados, como MeaTech y Wilk.
La miel de Bee-io responde a la creciente demanda de productos sostenibles. En Israel, donde la apicultura enfrenta limitaciones por urbanización y escasez de agua, esta innovación refuerza la posición del país como líder en tecnología alimentaria. En 2021, Bee-io se fusionó con Whitestone Group, valorada en 38 millones de NIS, consolidando su crecimiento. La empresa planea escalar su producción para satisfacer mercados internacionales, manteniendo precios competitivos.
El impacto ambiental de la apicultura comercial es significativo. La promoción de siete especies de abejas melíferas sobre otras 20,000 especies polinizadoras amenaza la biodiversidad. La agresividad de las abejas melíferas, combinada con la contaminación, pone en riesgo a polinizadores locales. Bee-io permite a las abejas retomar su función natural, reduciendo el impacto ecológico de la producción de miel. En 2022, la empresa recibió atención global tras ser destacada por el influencer Nas Daily.
Otros actores, como MeliBio, han recaudado 5.7 millones de dólares para producir miel sin abejas mediante fermentación y ciencia vegetal. Sin embargo, Bee-io se distingue por su enfoque en néctar puro y procesos patentados. La empresa también explora aplicaciones de su tecnología, como la producción de jalea real cultivada, demostrando propiedades antibacterianas en experimentos controlados.
Contexto global y avances en biotecnología
La fermentación microbiana no es exclusiva de Bee-io. En Países Bajos, Fooditive desarrolla ingredientes alternativos, mientras en Tailandia se investiga la fermentación de miel de abejas sin aguijón para producir hidromiel. En 2019, estudiantes del Technion – Israel Institute of Technology crearon miel sintética con la bacteria Bacillus subtilis, ganando una medalla de oro en la competencia iGEM. Estos avances reflejan un interés creciente en la biotecnología alimentaria.
El mercado de la miel enfrenta retos estructurales. La producción global, estimada en 3200 toneladas métricas en Israel, genera 15 millones de dólares anuales, pero la escasez de espacio y recursos hídricos limita su expansión. La apicultura comercial emplea 120,000 colonias para polinización, un servicio 30 veces más valioso que la producción de miel. Bee-io ofrece una alternativa que no depende de estos recursos, alineándose con los objetivos de seguridad alimentaria global.
La tecnología de Bee-io también aborda preocupaciones éticas. La apicultura intensiva contribuye al colapso de colonias, un fenómeno que afecta a las abejas melíferas por estrés nutricional y patógenos. Al eliminar la necesidad de explotar abejas, Bee-io promueve un modelo de producción más ético y sostenible. La empresa colabora con reguladores para garantizar que su miel cumpla con estándares internacionales de seguridad alimentaria.
En el panorama global, la biotecnología alimentaria está transformando industrias. La fermentación de precisión se utiliza para producir lácteos, carne y ahora miel sin recursos animales. Israel, con su ecosistema de startups, lidera esta revolución. Empresas como Bee-io no solo responden a la demanda de alimentos sostenibles, sino que fortalecen la reputación del país como centro de innovación tecnológica.