Los fundadores de SpaceIL de Israel anunciaron el miércoles que han comenzado los trabajos para “Bereshit 2”, un módulo de aterrizaje Lunar que intentará ser la primera nave espacial construida por el sector privado en aterrizar de forma segura en la Luna, después de que su antecedente fracasara el año pasado.
SpaceIL dijo que su intención es lanzar la nave a la Luna durante la primera mitad de 2024. Cuando se acerque a la Luna, la nave se separará en un orbitador – diseñado para orbitar la Luna durante varios años – y en dos vehículos de aterrizaje. Cada uno de los vehículos aterrizará en un lugar diferente y realizará varios experimentos científicos.
El proyecto, lanzado en cooperación con el Ministerio de Ciencia e Israel Aerospace Industries, fue presentado en la residencia oficial del Presidente Reuven Rivlin.
Rivlin saludó la “edad de oro de la exploración espacial israelí”, subrayando la importancia de la ciencia, la medicina y la investigación en una época de pandemia. “Nos dimos cuenta de cuánto más tenemos que aprender, no solo en planetas distantes y galaxias enormes, sino aquí en nuestra pequeña Tierra”, dijo.
El proyecto incluye la construcción de tres naves espaciales diferentes: Un orbitador y dos vehículos de aterrizaje. La mitad de los costos de la misión – estimados en unos 100 millones de dólares – serán financiados por acuerdos de cooperación internacional, mientras que la otra mitad será cubierta por donaciones y patrocinios.
El año pasado, después de entrar en órbita, la nave espacial Bereshit original perdió su motor principal y entró en un descenso descontrolado antes de estrellarse.
La nave espacial israelí tuvo que hacer frente a uno de los mayores retos de su viaje Lunar: la maniobra de aterrizaje, cuya última etapa fue controlada únicamente por la computadora de la nave espacial.