SAN FRANCISCO – Tras dominar el mercado de los vehículos eléctricos y lanzarse a la carrera espacial de los multimillonarios, el jefe de Tesla, Elon Musk, anunció la última frontera que pretende conquistar: los robots humanoides.
El irascible empresario dijo el jueves que tendría un prototipo inicial de un andrógino “Tesla Bot” para el próximo año.
Basado en la misma tecnología que los vehículos semiautónomos de la compañía, el robot será capaz de realizar tareas básicas repetitivas con el objetivo de eliminar la necesidad de que las personas se encarguen de trabajos peligrosos o aburridos, dijo Musk en un evento online sobre los avances de Tesla en inteligencia artificial (IA).
“Podría decirse que Tesla es la mayor empresa de robótica del mundo, porque los coches son robots semisentidos sobre ruedas”, dijo. “Tiene sentido poner eso en una forma humanoide”.
La promoción de la tecnología de automatización de Tesla se produce en un momento en el que el fabricante de automóviles se enfrenta a un mayor escrutinio sobre su sistema de asistencia al conductor, ya que los reguladores de seguridad de Estados Unidos han iniciado una investigación tras una serie de accidentes.
Se acusa a Tesla de engañar a los automovilistas haciéndoles creer que los llamados vehículos Autopilot pueden conducirse solos, aunque Musk ha defendido el sistema.
La controversia sobre el Autopilot no se discutió en la conferencia en línea de dos horas y media del jueves, ni se mencionó durante las preguntas de la audiencia.
En cambio, Musk prometió que su futuro robot sería una presencia benigna.
Dijo que el Tesla Bot, que tendrá manos de cinco dedos y vendrá en blanco y negro, está destinado a ser “amigable” y construido de tal manera que “puedes huir de él y muy probablemente dominarlo”.
“Esperemos que eso no ocurra, pero nunca se sabe”, bromeó.
Musk, la segunda persona más rica del mundo según Forbes, dijo en la conferencia que cree que los robots eliminarán el trabajo físico de las personas.
“Creo que, esencialmente, en el futuro, el trabajo físico será una opción”, dijo.
Como consejero delegado, Musk ha transformado a Tesla, que pasó de ser una empresa incipiente a convertirse en un referente en el sector de los coches eléctricos. El mes pasado, la compañía obtuvo su primer beneficio trimestral por encima de los 1.000 millones de dólares gracias a un récord de entregas.
Su empresa SpaceX también compite en el floreciente mercado aeroespacial comercial, mientras que Neuralink pretende desarrollar implantes cerebrales para conectar a humanos y ordenadores.
Pero el autodenominado “tecnócrata” también se ha enfrentado repetidamente a los reguladores por todo, desde su uso de las redes sociales para hablar de las operaciones de Tesla hasta los protocolos sanitarios locales del coronavirus que afectan a sus fábricas.
La empresa ha tenido un historial rocoso con su mano de obra humana, incluyendo acusaciones de prácticas laborales injustas y el despido de un organizador sindical.