Investigadores de la Universidad de Tel Aviv logran silenciar un gen relacionado con la metástasis en el cáncer de ovario mediante nanofármacos de ARN, abriendo nuevas posibilidades en el tratamiento de esta enfermedad.
Avance prometedor en la lucha contra el cáncer
Un equipo de investigación liderado por el profesor Dan Peer en la Shmunis School of Biomedicine and Cancer Research de la Universidad de Tel Aviv ha empleado nanofármacos de ARN para silenciar un gen que codifica una proteína responsable de la metástasis en el cáncer de ovario.
Este avance podría representar una nueva opción terapéutica para pacientes con cánceres agresivos y metastásicos resistentes a la quimioterapia y a la inmunoterapia.
El estudio fue publicado en la revista científica Science Advances en abril, y su autor principal, el profesor Peer, ha expresado su entusiasmo por lo que podría significar para pacientes sin otras opciones terapéuticas disponibles.
Un enfoque innovador para tratar el cáncer de ovario
El cáncer de ovario es el quinto cáncer más mortal en mujeres y afecta a 1 de cada 78 mujeres en el mundo. Actualmente, no existe un método de detección confiable para esta enfermedad y los síntomas suelen pasar desapercibidos.
El equipo de investigación decidió abordar un mecanismo básico en los tumores cancerosos: la división celular incontrolada.
Para ello, se enfocaron en silenciar un gen específico responsable de la producción de una proteína llamada CKAP5, que es clave en la metástasis del cáncer de ovario y resistente a la quimioterapia y la inmunoterapia.
Resultados alentadores en modelos animales
Los científicos utilizaron nanopartículas lipídicas que contenían ARN para silenciar el gen CKAP5 en células de cáncer de ovario metastásico. Como resultado, las células colapsaron y se logró una tasa de supervivencia del 80 % en modelos animales (ratones).
La interrupción de la división celular en las células cancerosas fue evidente, mientras que las células normales no se vieron afectadas.
Aplicación en otros tipos de cáncer
El profesor Peer planea probar este enfoque en otros tipos de cáncer en los que CKAP5 también está presente. Además, una empresa de California ha mostrado interés en colaborar en el desarrollo de esta tecnología, que podría estar disponible en ensayos clínicos con humanos dentro de dos o tres años.
La edición genética como meta futura
El objetivo último de estos investigadores es no solo silenciar los genes causantes de la metástasis en el cáncer de ovario y otros cánceres, sino también editarlos por completo del genoma. Esto podría marcar la diferencia entre tratamientos regulares y la capacidad de detener la enfermedad en seco con solo una o dos dosis de un nanofármaco de ARN.
Ya se han observado avances en la edición genética en casos de enfermedades genéticas raras del hígado, donde se ha aplicado una única dosis de tratamiento con éxito durante tres años. No obstante, el cáncer es más complejo, ya que puede involucrar a varios genes. A pesar de ello, el profesor Peer y su equipo se muestran optimistas y están decididos a seguir avanzando en esta dirección.