Extractos de CBD de Shaare Zedek y Tikun Olam reducen convulsiones en 50% en pacientes con epilepsia resistente, según estudios.
Avances israelíes en tratamientos con CBD para epilepsia
Investigadores del Centro Médico Shaare Zedek en Jerusalén, en colaboración con la empresa Tikun Olam, han desarrollado extractos de cannabidiol (CBD) que reducen significativamente las convulsiones en pacientes con epilepsia resistente. Desde 2016, ensayos clínicos han demostrado que estas formulaciones, aprobadas por el Ministerio de Salud de Israel, logran una reducción de hasta un 50% en la frecuencia de convulsiones en pacientes con síndromes severos como Dravet y Lennox-Gastaut. Un estudio publicado en 2020 en el Journal of Neurology documentó que, de 80 pacientes tratados, el 52% experimentó una mejora sustancial, lo que posiciona a Israel como líder en esta área.
El Centro Médico Shaare Zedek, bajo la dirección del neuropediatra Adi Aran, ha liderado ensayos clínicos que combinan CBD purificado con bajas dosis de tetrahidrocannabinol (THC). Los resultados muestran que el CBD actúa sobre los receptores neuronales, estabilizando la actividad eléctrica en el cerebro. En 2018, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) aprobó Epidiolex, un medicamento basado en CBD, para tratar formas raras de epilepsia pediátrica, inspirado en parte por investigaciones israelíes. Las formulaciones de Tikun Olam se exportan actualmente a mercados en Estados Unidos y Canadá.
Tikun Olam, fundada en 2005, fue la primera empresa en Israel en obtener una licencia para cultivar cannabis medicinal. En 2012, desarrolló una cepa con 17% de CBD y menos del 2% de THC, minimizando efectos psicoactivos. Esta innovación permitió tratar a pacientes pediátricos sin riesgos asociados al THC. La empresa colabora con el profesor Raphael Mechoulam de la Universidad Hebrea, quien aisló el THC en 1964 y ha contribuido a la validación científica de estas terapias.
Los ensayos clínicos en Israel han incluido a pacientes de entre 2 y 18 años con epilepsia resistente a tratamientos convencionales. En un estudio de 2021, el Centro Médico Shaare Zedek reportó que el 60% de los participantes mostró una reducción en la intensidad de las convulsiones, y un 25% logró una disminución de más del 75%. Estos resultados han impulsado la demanda global de los extractos israelíes, que cumplen con estrictos estándares de calidad.
Datos clave sobre el uso de CBD en epilepsia
- Reducción de convulsiones: Estudios confirman una disminución del 50% en pacientes con epilepsia resistente.
- Síndromes tratados: Dravet y Lennox-Gastaut, formas graves de epilepsia pediátrica.
- Colaboradores: Shaare Zedek, Tikun Olam y Raphael Mechoulam lideran la investigación.
- Exportación: Formulaciones israelíes se distribuyen en EE. UU. y Canadá.
- Aprobación: Epidiolex, basado en CBD, aprobado por la FDA en 2018.

Colaboración entre ciencia y regulación en Israel
El Ministerio de Salud de Israel ha facilitado la investigación de cannabis medicinal desde finales de los años 90, otorgando licencias a empresas como Tikun Olam. En 2010, se reguló el uso médico del cannabis, permitiendo a pacientes con prescripción acceder a tratamientos a un costo de 370 NIS mensuales en 2013. Actualmente, más de 33,000 pacientes en Israel reciben cannabis medicinal para diversas condiciones, incluyendo epilepsia, cáncer y dolor crónico.
El profesor Raphael Mechoulam, pionero en la investigación de cannabinoides, ha trabajado con Tikun Olam para garantizar la calidad de los extractos. En 2019, la empresa abrió una instalación de cultivo en California, expandiendo su alcance. Los ensayos en Shaare Zedek han utilizado cepas como Avidekel, con alto contenido de CBD, que han mostrado eficacia en estudios con ratones inducidos con epilepsia, según el European Journal of Medicine.
En 2023, un estudio en el Centro Médico Soroka y la Universidad Ben-Gurion evaluó el impacto a largo plazo del CBD en 150 pacientes. Los resultados indicaron que el 70% mantuvo una reducción estable de convulsiones tras dos años de tratamiento. Estos datos han reforzado la confianza en las formulaciones israelíes, que se producen bajo estrictas normas de la Standards Institute of Israel.
La colaboración entre instituciones académicas, empresas y el gobierno ha permitido a Israel posicionarse como líder en la investigación de cannabis medicinal. La experiencia de Shaare Zedek y Tikun Olam ha inspirado estudios en otros países, como Reino Unido y Australia, donde se exploran aplicaciones similares del CBD.
Impacto global de las formulaciones israelíes
Las formulaciones de CBD desarrolladas en Israel han ganado reconocimiento internacional. En 2024, Tikun Olam firmó acuerdos con distribuidores en Florida y Delaware para suministrar aceites y cápsulas. La empresa ha realizado estudios observacionales con 900 pacientes mayores de 65 años, reportando una mejora del 94% en la calidad de vida tras seis meses de uso, según datos publicados en revistas médicas.
El Centro Médico Shaare Zedek continúa sus investigaciones, enfocándose en optimizar las dosis de CBD para minimizar efectos secundarios, que afectan a menos del 10% de los pacientes, según un informe de 2022. Los efectos más comunes incluyen somnolencia y fatiga, pero son manejables con ajustes en la prescripción.
Otros centros, como el Assaf Harofeh Medical Center, han explorado el uso de CBD en trastornos del espectro autista, con resultados prometedores que complementan su aplicación en epilepsia. En un estudio de 2019, el 74.5% de los pacientes con autismo mostró mejoras en comunicación y reducción de ansiedad, lo que sugiere un potencial más amplio para el CBD.
Israel ha establecido un modelo de investigación que combina ciencia rigurosa con políticas regulatorias avanzadas. La experiencia acumulada en los últimos 20 años ha permitido desarrollar tratamientos que benefician a pacientes en todo el mundo, consolidando al país como un referente en el uso médico del cannabis.