El Ministerio de Defensa de Israel planea utilizar un software que analiza los datos recogidos de los teléfonos móviles – producido, según los medios de comunicación hebreos, por la empresa de software espía NSO – para ayudar a localizar a los posibles portadores del coronavirus con el fin de realizarles pruebas.
El ministro de Defensa de Israel, Naftali Bennett dijo a los periodistas que el “Coronómetro” necesitaría la aprobación del Gabinete – que probablemente se dará – así como una evaluación de las cuestiones de privacidad del fiscal general, que tiene el poder de bloquear el movimiento. Sin embargo, podría estar en funcionamiento en las 48 horas siguientes a la recepción de la luz verde.
Israel ya realiza pruebas a unas 5.000 personas al día para detectar el nuevo virus, que puede causar insuficiencia respiratoria pero también estar presente durante varios días sin causar síntomas e impone una cuarentena estricta a quienes se detecta que lo tienen. Los funcionarios de salud esperan duplicar pronto el número diario de pruebas
Los funcionarios utilizan la vigilancia a nivel militar para rastrear los movimientos de los civiles, lo que da lugar a quejas sobre la invasión de la privacidad de los grupos de derechos.
Hasta ahora, Israel ha registrado 4.831 casos del virus y 18 muertes. Hasta el lunes, el Primer Ministro Benjamin Netanyahu se autoaisló después de que un asistente parlamentario diera positivo para el virus.
Bennett dijo que los datos de rastreo de teléfonos celulares y de geolocalización que se utilizan actualmente ya no eran eficaces para encontrar a los portadores más probables.
Según los medios de comunicación de Israel, el sistema asigna una calificación de 1 a 10 a la probabilidad de que una persona sea portadora del virus. Ésta se actualiza en tiempo real y podría, por ejemplo, saltar si alguien visita una tienda de comestibles en la que se han identificado portadores.
Los medios de comunicación de Israel dijeron que el software había sido desarrollado en cooperación con la NSO.
La NSO se negó a hacer comentarios y Bennett dijo que no “anunciaría quién y qué, porque también hay elementos complejos en este contexto”.
Bennett dijo que, aunque no era perfecto, el nuevo software era la mejor opción disponible para encontrar probables portadores.
“Todo lo que se necesita es verter la información de las pruebas, para vincular el rastreo celular que estamos utilizando de todos modos, hoy en día, en las pruebas epidemiológicas”.
Una fuente cercana al asunto dijo que el primer producto civil de la NSO estaba siendo probado por unos 15 gobiernos de todo el mundo para su uso por los reguladores de salud.