En diciembre, un estudio de laboratorio descubrió que la cepa Ómicron de coronavirus se multiplicaba en las células nasofaríngeas decenas de veces más rápido que la variante Delta, pero era varias veces más lento en el tejido pulmonar.
Científicos de la Universidad de Cambridge han obtenido resultados similares. Cuatro nuevos estudios publicados en la última semana confirman que Ómicron afecta principalmente a las vías respiratorias superiores y penetra menos en los pulmones.
Los estudios realizados por virólogos de Gran Bretaña, Estados Unidos y Bélgica en animales de laboratorio, ratones y hámsters, han confirmado que, en los animales de laboratorio, Ómicron causa una enfermedad menos grave, afecta menos a los pulmones e infecta principalmente las vías respiratorias superiores. Los animales infectados con Omicron tenían una carga viral mucho menor en sus pulmones, perdían menos peso y se recuperaban más rápidamente que los animales infectados con otras cepas del coronavirus.
Las mismas mutaciones que hacen que el virus sea más infeccioso y acelere su propagación también han alterado su capacidad de penetrar en diferentes tipos de tejidos, y la nueva cepa de coronavirus se ha acercado a las propiedades de los virus de la gripe estacional.
The Guardian informa de los resultados de una nueva investigación que confirma las pruebas epidemiológicas de la relativa facilidad de las enfermedades causadas por Ómicron, señalando que las publicaciones aún no han sido sometidas a una revisión científica por pares, pero que todos los resultados preliminares apuntan en la misma dirección.