Los terroristas de Hamás dijeron a uno de sus niños rehenes que el Estado de Israel había sido destruido, una de las muchas mentiras contadas para doblegar a los rehenes.
Eitan Yahalomi, un niño de 12 años que fue liberado a finales de noviembre tras 50 días de cautiverio, contó a Ynet que sus captores le mintieron sobre el destino de su familia.
“A veces me decían que me llevarían para estar con ella, y yo tenía esperanzas”, dijo Eitan.
“Imaginaba lo que le había ocurrido a mi familia e intentaba hablar con ellos dentro de mi cabeza. Tenía miedo de que tal vez les hubiera pasado algo”, dijo. “Los terroristas me dijeron que el kibbutz ya no existía y que el Estado de Israel no existía”.
Ohad, el padre de Eitan, estaba fuera protegiendo a su familia la mañana del 7 de octubre y fue tiroteado por terroristas y secuestrado para llevarlo a Gaza. Su madre, Batsheva, y sus dos hermanas también fueron secuestradas en un principio, pero consiguieron escapar cuando aparecieron dos tanques de las FDI y asustaron a sus captores.
Tras la liberación de Eitan, su tía, Devora Cohen, declaró a la cadena de televisión francesa BFM que los terroristas obligaron a su joven sobrino a ver vídeos que habían tomado de la masacre del 7 de octubre.
“Los terroristas de Hamás le obligaron a ver películas de los horrores, de las que nadie quiere ver, le obligaron a verlas”, dijo Cohen.
Afirmó que “ayer estábamos tan contentos” de tenerlo en casa, “pero ahora, cuando lo sé, me preocupo” por él.
“¿Cómo puedes sentirte bien con una experiencia así?”, preguntó. “Es un niño tranquilo, le va a llevar tiempo dejar salir sus emociones”.
Calificó de “monstruos” a los terroristas de Hamás que mantenían cautivo a Eitan y afirmó que si algún niño cautivo lloraba, “lo amenazaban con rifles para que se callara”.
“Cuando llegó a Gaza, todos los residentes, todos, le pegaron. Es un niño de 12 años”, dijo Cohen. “Quizá soy ingenuo, realmente quería esperar que fuera tratado con humanidad, pero parece que no fue así”.