En una declaración conjunta sin precedentes publicada el martes por la noche, las organizaciones terroristas enfatizaron que Israel era responsable de la última ronda de agresión, y señalaron los ataques de las FDI en la Franja de Gaza como un factor en la escalada.
“Nuestra respuesta conjunta hoy con docenas de granadas de mortero en los puestos militares israelíes y a los aviones que atacan la Franja de Gaza es un mensaje para todos los interesados de que los crímenes del enemigo no pueden ser tolerados bajo ninguna circunstancia”, dijeron las organizaciones en un comunicado. “La resistencia no permitirá que el enemigo fuerce nuevas ecuaciones para que derrame la sangre de nuestro pueblo, y le advierte contra la continuación de nuestro ataque, todas las opciones están abiertas en la resistencia, los bombardeos serán recibidos con bombardeos, la sangre será respondida con sangre y nos atendremos a esta ecuación sea cual sea el precio”. Al mismo tiempo, Hamás en Gaza citó a una fuente de la “resistencia” que afirmó que los contactos con Egipto habían llevado a un acuerdo para restaurar la calma.
Mientras tanto, el fuego de cohetes desde Gaza hacia el territorio israelí se reanudó cuando la primera alerta roja sonando en la tarde tanto en Netivot como en Ashkelon. Anteriormente, se lanzaron repetidas alarmas en el Consejo Regional de Eshkol, en las comunidades que rodean la Franja de Gaza y en el centro de Negev, después de que se dispararon proyectiles de mortero desde la Franja de Gaza. Dos proyectiles de mortero cayeron en áreas abiertas. A las 20:00, se dispararon alrededor de 70 proyectiles de mortero y cohetes contra Israel. Entre las municiones disparadas se hhalló que varios cohetes fueron producidos en Irán.