Hamás afirmó el viernes por la noche que había liberado a dos de los rehenes que capturó durante su mortífero ataque terrorista contra Israel del 7 de octubre, alegando “razones humanitarias”.
Las dos han sido identificadas como Judith Raanan, de 59 años, y Natalie Raanan, de 18, madre e hija con doble nacionalidad israelí y estadounidense.
Las dos residen en Chicago y habían estado visitando a su familia en el kibutz Nahal Oz el día del atentado.
Fuentes israelíes confirmaron que las dos habían sido entregadas a la Cruz Roja y serían trasladadas a Egipto. Sus familias han sido informadas.
Una fuente declaró a la CNN que los dos han sido liberados por “motivos humanitarios”, ya que la madre se encuentra en mal estado de salud.
Gal Hirsch, responsable de presos y desaparecidos, declaró que los dos se encuentran en territorio israelí y se dirigen a reunirse con su familia.
La liberación de ambos es el resultado de las negociaciones entre Qatar y Hamás que comenzaron después de que Hamás secuestrara a unas 200 personas en Israel durante su ataque del 7 de octubre.
El Foro de Familias de Rehenes y Desaparecidos acogió con satisfacción la devolución de los dos rehenes y declaró: “La continuación de la retención de los rehenes es un crimen de guerra. Cientos de familias esperan la ayuda de los líderes de los países árabes después de que las acciones de Hamás conmocionaran al mundo entero”.