El grupo terrorista Estado Islámico (ISIS) ha reivindicado la responsabilidad de un ataque en el norte de Mozambique, justo al sur de un emplazamiento de proyectos de gas valorizado en 60.000 millones de dólares que están desarrollando empresas como Exxon Mobil y Total.
Los insurgentes atacaron la ciudad de Mocimboa da Praia el lunes, ocupando brevemente algunas zonas y sus cuarteles del ejército antes de ser expulsados el martes, dijeron las autoridades de Mozambique y los analistas de seguridad.
ISIS reivindicó el ataque a través de su agencia de noticias Amaq, que afirmó que decenas de soldados y policías habían muerto o estaban heridos. El gobierno no ha proporcionado una cifra de muertos o heridos.
“Fuentes militares dijeron a Amaq que combatientes del Estado Islámico atacaron cinco cuarteles del ejército y la policía en la ciudad”, dijo la agencia en el informe del martes, añadiendo que también se habían incautado armas, municiones y otros equipos.
El portavoz del gobierno, Filimao Suaze, dijo que los atacantes en retirada habían dejado “un rastro de destrucción y cadáveres”, y que se había reforzado la seguridad en la zona.
Mientras que ISIS ha reivindicado una serie de ataques recientes en la provincia más septentrional de Cabo Delgado, donde se han producido los mayores hallazgos de gas en una década frente a sus costas, la reivindicación del martes es la primera que se corresponde con una rara confirmación oficial de un ataque.
Sin embargo, el gobierno no reconoce tales afirmaciones.
Mocimboa da Praia, a 60 kilómetros (37 millas) al sur de los proyectos de gas, anteriormente sirvió como el principal aeropuerto para los trabajadores internacionales que volaban hacia los desarrollos y su puerto se utiliza para las entregas de carga.
Exxon y Total no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios enviadas por correo electrónico fuera del horario de trabajo habitual.
Las ONG dicen que el gobierno debe hacer más para proteger a los civiles, en su mayoría pobres, de la zona y aumentar la transparencia.
“Esta violenta escalada en Mocimboa da Praia es la culminación de un trágico fracaso del gobierno mozambiqueño en la protección de la población de esta zona tan volátil”, dijo Muleya Mwananyanda, director adjunto del grupo de derechos humanos Amnistía para África Oriental y Meridional.
“Durante casi tres años, los grupos armados han estado atacando a los habitantes de los alrededores de Cabo Delgado, causando un sufrimiento humano incalculable sin tener que rendir cuentas”.
La organización dijo que unas 350 personas han sido asesinadas desde 2017, pero muchos estiman una cifra mucho más alta. Se ha informado de la muerte de más de 900 personas, según un organismo no gubernamental, el proyecto Datos de Localización y Sucesos de Conflictos Armados.