Según informes policiales, un autobús israelí fue tiroteado mientras se encontraba en el centro de Judea y Samaria el sábado por la noche, pero no hubo heridos.
Las Fuerzas de Defensa de Israel indicaron en un comunicado que los disparos procedían de la localidad palestina de Silwad y se dirigían a un autobús que pasaba por la ruta 60, la principal carretera norte-sur de Judea y Samaria, no lejos del asentamiento de Ofra.
Según el Consejo Regional de Binyamin, se encontraron al menos ocho agujeros de bala en las ventanas y la carrocería del autobús tras el ataque contra el autobús de Egged Ta’avura, que estaba completamente lleno en ese momento.
El motorista siguió su camino hasta llegar al cruce adyacente de Shiloh, donde llegaron las fuerzas desplegadas y empezaron a buscar al autor o autores. Un equipo de médicos también acudió al cruce, pero no fue necesario.
Según los medios de comunicación palestinos, el ejército acordonó la entrada a Silwad como parte de su búsqueda de los autores.
Yisrael Gantz, presidente del Consejo Regional de Binyamin, dijo que el ataque demostraba que las autoridades israelíes habían “perdido su capacidad de disuasión” y que formaba parte de una escalada continua de los militantes palestinos.
“Para eliminar a los terroristas y restablecer la disuasión sobre el terreno, necesitamos una acción rápida, firme y completa”, añadió.
Como parte de la Federación Sindical Histadrut, el Sindicato de Conductores de Autobuses de Israel ha pedido que se ponga fin a la “violencia y el terror” dirigidos contra los autobuses israelíes.
El sindicato emitió un comunicado en el que decía: “No debemos olvidar la sangre de los conductores y pasajeros”.
El incidente se produjo cuando las tensiones aumentaban en Judea y Samaria como consecuencia del aumento de las redadas y operaciones de las fuerzas de seguridad israelíes en respuesta a una serie de actos terroristas contra israelíes que causaron 19 muertos a principios de este año.
Alrededor del amanecer del sábado, tres mujeres palestinas fueron detenidas cerca de un puesto de control en Judea y Samaria llevando una metralleta casera en su coche.
Según el Ministerio de Sanidad palestino, un hombre desarmado de 58 años fue abatido por soldados israelíes el viernes durante una redada de las FDI en el norte de Judea y Samaria.
Las FDI admitieron haber hecho uso de la fuerza durante una redada en Tubas, pero afirmaron que solo estaba dirigida a los sospechosos armados que habían abierto fuego y lanzado bombas incendiarias contra las fuerzas.
De las imágenes no se desprende que Salah Sawafta estuviera participando en los combates antes de ser abatido.
El hermano de Salah dijo a Associated Press: “Hubo escaramuzas con jóvenes en los alrededores, y Salah recibió un disparo de un francotirador en la cabeza después de comprar una bolsa de pan en una tienda de comestibles”.