La Jihad Islámica Palestina disparó un nuevo tipo de cohete contra Israel con una enorme ojiva de 300 kilogramos (660 lb) que dejó un enorme cráter donde explotó en el sur de Israel, informó el viernes el Canal 12.
El cohete, que transportó una mayor carga explosiva que la mayoría de los misiles disparados por el grupo terrorista, aterrizó en una zona abierta de una comunidad israelí adyacente a Gaza y dejó un cráter con un diámetro de 16 metros (52 pies) y 2 metros (6 pies) de profundidad.
El Canal 12 dijo que el tamaño del cohete sorprendió a Israel y señaló que fue desarrollado localmente con la ayuda de ingenieros iraníes.
El informe dice que la Jihad Islámica ha logrado, en algunos aspectos, superar las capacidades técnicas del grupo terrorista Hamás, que es mucho más grande. Sin embargo, señaló que Hezbolá en el Líbano tiene cohetes de ese tamaño y más grandes dirigidos a Israel.

La Jihad Islámica recibió cientos de millones de dólares en ayuda de Irán, que espera utilizar a sus proxys en Gaza y Líbano para disparar miles de misiles contra Israel en caso de conflicto.
Desde la madrugada del martes hasta el jueves por la mañana, Israel y la Jihad Islámica libraron una batalla en la que se dispararon más de 450 cohetes y granadas de mortero contra Israel desde Gaza. Las Fuerzas de Defensa de Israel respondieron con docenas de ataques aéreos contra las instalaciones de la Jihad Islámica y contra las células terroristas mientras disparaban y se preparaban para lanzar cohetes.
Fuentes palestinas dijeron que 34 habitantes de Gaza murieron. Israel dijo que la abrumadora mayoría de las víctimas mortales eran terroristas, pero los funcionarios de derechos humanos dijeron que había 16 civiles entre los muertos.
El ala militar de Hamás dijo el viernes que uno de sus miembros murió durante el estallido, pero no especificó si estaba involucrado en los combates.
Cincuenta y ocho israelíes sufrieron heridas leves y moderadas o recibieron tratamiento para la ansiedad.
En respuesta a los ataques, el ejército israelí llevó a cabo docenas de ataques contra bases de la Jihad Islámica e instalaciones de armamento, así como contra equipos de lanzamiento de cohetes en toda la Franja, en los que murieron 25 terroristas, según las FDI.
El viernes, las escuelas permanecieron cerradas en la periferia de Gaza, pero al mediodía los consejos locales anunciaron el regreso a la vida normal.