En un discurso en honor al comandante militar de Hezbolá, Fuad Shukr, quien fue asesinado recientemente, el líder del grupo terrorista, Hassan Nasrallah, declaró que están preparando una “respuesta cuidadosamente considerada” y advirtió que los israelíes “no saben de dónde vendrá”.
Nasrallah también aseguró que la muerte de Shukr no afectará significativamente el funcionamiento de la organización.
“Cuando uno de nuestros comandantes se convierte en mártir, lo reemplazamos rápidamente. Tenemos una excelente nueva generación de comandantes”, declaró Nasrallah.
El líder de Hezbolá rechazó la idea de que la presión militar sobre Hamás, Hezbolá u otros grupos respaldados por Irán los lleve a rendirse.
“La aspiración de [el primer ministro] Benjamin Netanyahu es que Hamás le diga: ‘Ven, aquí están los rehenes y las armas’. Eso no sucederá. No nos rendiremos, ni en Gaza, ni en el Líbano, ni en Yemen”, afirmó enfáticamente.
Nasrallah reiteró que la única manera de poner fin a la guerra en el frente del Líbano es que Israel detenga su “agresión” en Gaza.
Además, reveló que ordenó a las fuerzas de Hezbolá en el sur del Líbano que redujeran los combates ayer y hoy, pero que los reanudarán con mayor intensidad mañana.