El jueves, el Secretario de Estado de los Estados Unidos Mike Pompeo anunció que estaba ampliando el alcance de las sanciones a los metales de Irán, apuntando a 22 materiales específicos que mencionó fueron utilizados en relación con los programas nucleares, militares o de misiles balísticos de Irán.
Pompeo en una declaración lo llamó una “gran expansión” de las sanciones relacionadas con los metales de Irán administradas por el Departamento de Estado, permitiendo a Washington poner en la lista negra a aquellos que a sabiendas transfieren los materiales a Irán.
“Los programas nucleares, de misiles balísticos y militares de Irán plantean una grave amenaza a la paz y la seguridad internacionales”, señaló Pompeo en la declaración.
Pompeo también declaró que estaba firme en su determinación de que la fuerza de seguridad de élite de Irán, el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), controla el sector de la construcción de Irán.
Como resultado, todavía se pueden imponer sanciones a quienes a sabiendas transfieran ciertos materiales, incluyendo grafito o metales crudos o semiacabados, hacia o desde Irán para ser utilizados en relación con el sector de la construcción de la República Islámica, continuó Pompeo.
Los materiales que indicó que había determinado que se utilizan en relación con los programas nucleares, militares o de misiles balísticos de Irán incluyen polvo de aluminio con una pureza superior al 98%.
En junio, Reuters informó que el complejo de aluminio de la Compañía de Alúmina de Irán cerca de la ciudad de Jajarm también alberga una instalación secreta, establecida por el CGRI, que ha producido polvo para su uso en el programa de misiles de Irán.
El polvo de aluminio es un ingrediente clave en los propulsores de combustible sólido utilizados para lanzar misiles.
Los Estados Unidos ya han impuesto sanciones al sector metalúrgico de Irán en un esfuerzo por reducir los ingresos iraníes.
Las tensiones entre Washington y Teherán han aumentado desde que Trump se retiró unilateralmente en el 2018 del acuerdo nuclear con Irán alcanzado por su predecesor, Barack Obama, y comenzó a reimponer las sanciones que se habían suavizado en virtud del acuerdo.