Rusia anunció que soldados rusos y turcos realizaron ejercicios militares conjuntos en la gobernación de Idlib, por primera vez, para asegurar la carretera internacional M4.
El martes, la agencia de noticias rusa TASS citó al jefe del Centro Ruso para la Reconciliación, Alexander Greenkivich, que unidades de la policía militar rusa y las fuerzas armadas turcas realizaron sus primeros ejercicios conjuntos en el noroeste de Siria en un área cerca de Saraqib en la zona este de Idlib.
Greenkivich fijó varios objetivos para los ejercicios militares, entre ellos la eliminación de lo que llamó los militantes, la evacuación del equipo militar dañado y la prestación de asistencia médica a los heridos en los ataques a las patrullas rusas en la región.
Esto se produjo después de que las patrullas conjuntas ruso-turcas fueran objeto de repetidos ataques contra la autopista internacional M4 de Alepo-Lattakia, dirigidos específicamente contra vehículos rusos e infligiendo pérdidas materiales y humanas.
Las redes locales publicaron imágenes del vehículo ruso que fue alcanzado, indicando que las fuerzas turcas habían encontrado dispositivos de lanzamiento de misiles mientras peinaban la zona de donde procedía el proyectil.
Rusia había criticado la actuación de Turquía en las zonas del acuerdo de cesación del fuego en Idlib. El Ministerio de Defensa ruso emitió una declaración hace dos semanas, en la que pedía a Ankara que adoptara medidas para “garantizar el orden” en los lugares en que se despliegan las fuerzas turcas y para poner fin a las “actividades delictivas” dirigidas contra los grupos armados pro rusos.
Ankara acusa a los grupos armados no afiliados a ella de ser responsables de tomar como objetivo las patrullas conjuntas, con el fin de “desestabilizar la situación y sabotear los esfuerzos de paz” en la región.